19 de abril de 2007

CORREO BASURA


Hay un niño risueño, fotografiado frente a una libreria, que es hijo de una trabajadora del BSCH de Santander, de un trabajador del Sabadell de Lérida y de una empleada de Citibank de Almería. Y lo que es peor, escurridizo que es el muchacho, se ha perdido de todos y cada uno de sus múltiples padres y se apela a nuestra buena voluntad para dar con él, con toda clase de detalles para certificar la autenticidad del caso frente a la maledicencia genelarizada. Es lo que se conoce como junk-mail o spam, entre nosotros: correo basura o borrar sin leer.

Las variantes son muchas. Los hay que invitan a perder peso con una dieta milagrosa. Incluso timos en toda regla (que no son spam, pero sí basura) como el que recibí la semana pasada. En inglés, contándome una historia de una herencia y un entramado burocrático que salvar para recuperarla al 50% (de verdad ¿hay quien cae en estas "estampitas" contemporáneas?). Pero mis favoritos son aquellos, estilo anuncio de turrón navideño ("vuelve, a casa vuelve, por Navidad"), en los que se nos pide ayuda en un caso urgente. Ya sea sangre en varios hospitales en los que, curiosamente, la directora médica es la misma, niños perdidos (el más común), viagra a buen precio, cadenas de cartas del tipo o reenvías a diez usuarios o te ocurrirá lo que a Samuel el muñones, páginas porno camufladas, falsos virus y un largo etcétera.

¿Qué consiguen con esto?. Pues no hay una idea clara del objetivo, o no hay un objetivo común. Está el virus sin más, saturar los correos con los reenvíos masivos, pero sobre todo la posesión de direcciones de correo que incluso venden a terceros (consultar). Lo peor es que lo consiguen apelando a nuestra buena voluntar, porque un click parece ser despreciable frente a la posibilidad de hacer el bien. Nuestra conciencia nos traiciona. Aunque lo peor realmente es que esa herramienta, que en algún caso desesperado nos podría resultar útil, como en el cuento infantil del pastor que gritaba que viene el lobo, que viene el lobo, deje de serlo por su mal uso. Hace un par de semanas recibí un correo de una persona que regalaba los perros que había parido su perra. Tuve que comprobar la dirección, saber como había conseguido la mía, y cerciorarme de que era cierto, antes de reenviarlo. Esa es la verdadera consecuencia negativa para mi de todo esto.

Incluso hay una nueva variante que es el spam político, algo así como difama que algo queda. Hay numerosas presentaciones y videos menospreciando a nuestros políticos que saturan la red. A mi me parece divertido, creo que si algo caracteriza al español medio es su capacidad histórica para reirse de sí mismo y de los demás. El problema es cuando esto te lo "venden" como cierto. Por ejemplo, Ansón (el cachondo) transcribe una supuesta carta "robada" de Zapatero a Fidel Castro. La carta contiene frases del tipo: Querido y admirado presidente; la lucha de vuestra excelencia por la libertad...en fin, tan ridículo como increible. El caso es que quien lea el Mundo sabrá de la rutina de este juego (hay otra carta de ZP a Otegui) pero circula por la red como verdadera. La gente la reenvía y queda el rescoldo. También pienso que somos mayorcitos para discernir entre real y falso, entre verdad o mentira, y sobre todo para asumir las consecuencias de que nos hayan engañado. Pero no deja de ser un spam molesto, además de una curiosa forma de hacer periodismo.

Si queréis más información sobre spam os dejo algunas direcciones que pueden ser útiles:




1 comentario:

Dudu dijo...

Efectivamente el spam es muy molesto. Recuerdo uno muy reenviado que hablaba que el grupo La Oreja de Van Gogh era proetarra y llenaba los caudales de los terroristas. Hasta tal punto llego el tema que tuvieron que emitir un comunicado para desmentirlo y afirmar que eran apolíticos, que se dedicaban a cantar y punto. Difama que algo queda.
Por cierto, ¿viagra a buen precio? ¿donde, donde?