31 de mayo de 2011

SIMPLES



Perdonad el acceso de sexismo, pero los hombres somos muy simples. Y no estoy pensando en lo "único". Lo digo en general. Y yo, en particular, creo que además de simple, en el fondo, como muchos otros barbudos, no he dejado de ser niño del todo. Y mira que el cuerpo, con esos michelines, esas ojeras como torrijas, y un, por desgracia, largo etcétera, anda dándote avisos. La hipoteca, los pañales, las resacas eternas...pero nada, que no terminamos de crecer. Ayer, casi por sorpresa, me cambiaron en portátil en el trabajo. Es una herramienta, pero ¡ me hizo una ilusión ! Y objetivamente era una buena noticia ¿para qué negarlo? Con suerte con éste ya no tendré ese tic nervioso contando las veces que parpadea el dichoso relojito de arena del windows mientras excel traquetea. Pero no era eso, no hilaba tan fino en mis alegrías. Tenía un regalito. Un aparatito nuevecito por desenbalar, por montar, por colocar, por conocer ¡ Y era mío ! Además tiene lucecitas en las teclas para la noche, que parece que el mismísimo Thomas Alva Edison descansa bajo la r y la t. Porque los hombres somos simples. Nos llenan este tipo de cosas. Somos como un chupete bicéfalo: simples como su mecanismo, pero con dos cabezas ¿o no?

MICROS (HUMOR PROPIO)



30 de mayo de 2011

IGUALDAD

Mi madre, además de una gran cocinera, fue una pionera de la igualdad. Cuando aquello de niños y niñas somos iguales era una quimera impensable, y el rosa y el azul batallaban en desigualdad mientras Mazinguer Z le pegaba bombazos a la Barbie, ella fue capaz de intoducir la dualidad de género en su forma de hablar con una naturalidad pasmosa. Ocurría siempre en un momento muy concreto de nuestro devenir diario. Era cuando al vaso de su paciencia ya no le faltaba la gota que lo colmara, entonces acudíamos alguno de sus vástagos con alguna variopinta solicitud del tipo mamá quiero una camiseta. Sí, claro- sentenciaba ella- una camiseta y un camiseto. Toma igualdad. Daba igual que la sugerencia fuera masculina (quiero dinero), o femenina (dame galletas), con una maestría sin género que ya la quisiera la ministra, daba la vuelta, trasmutando al masculino con el femenino, con arte torero: ni dinero ni dinera. Ni galletas ni galletos. De hecho empiezo a pensar que de ahí me nació la afición adolescente por el fútbol y la juerga, normal, con tanta pelota y tanto pelote...

MICROS



Sufría la peor de las torturas: ser ciego y tener miedo a la oscuridad.

28 de mayo de 2011

SONETO DEL DESALIENTO

El légamo sin vida que ahora ves
Ahogándose reseco en náusea viva,
Ha tiempo fue un ensueño a la deriva
Buscando aliento lejos del ciprés.

Mas algo –un no sé qué- ocurrió después, Que transmudó el aliento en sombra esquiva Y al sueño en pesadilla que derriba Los últimos baluartes de su fe

En ser barro hecho carne. Y ahora ansía, Sin hálito ninguno que lo alumbre, Mudarse eternamente en queda herrumbre,

Librarse de la asfixia; y qué no haría
Por dar bajó el ciprés con su osamenta
Gastada por la vida desatenta.

27 de mayo de 2011

MALDITA ERGONOMÍA

Cuando empiezo a trabajar lo hago erguido y con cierto orgullo. Brazos casi en ángulo recto, curvatura de las rodillas según la legislación vigente, espalda bien rectita dándole sentido al sustantivo respaldo. En fin, ergonómicamente hecho un pincel. A las diez de la mañana la pierna derecha ya anda bastante remolona. En el vigésimo email se tropieza con el cable de monitor, que responde con un interferencia a modo de cosquillas. La izquierda siempre fue una envidiosa, así que ella se lanza a por el enchufé de la cpu,. Las rodillas claudican y se relajan en grados sin contemplaciones. Entre mi columna vertebral y el respaldo de la silla cabría un luchador de sumo. En la trigésima llamada el único contacto que mi espalda mantiene con la silla es por el cuello. Hago verdaderos esfuerzos por mirar al frente, pero como sujeto el teléfono con la oreja, casi tengo que mirar a la pantalla con parábola. La pierna derecha hace cosquillas a los enchufes de mi compañera y la izquierda la tengo perdida entre una selva de cables, está encantada, no quiere salir. El culo se balancea al borde del asiento con peligrosa arrogancia. Empiezo bien, sí, pero la rutina puede más que los principios ergonómicos y al terminar mi jornada laboral soy un escorzo de mí mismo...¿será una metáfora?

MICROS




Antes de decidir si la tormenta iba a ser buena o no, miró el color de la lluvia.




Pd: porque nunca llueve a gusto de todos...

26 de mayo de 2011

FRIKI

Acabamos de descubrir una nueva serie: The big bang theory. Básicamente se trata de cuatro amigos frikis, coquitos, que trabajan en el Instituto Tecnológico de California, enganchados a los juegos online y a todo tipo de series de televisión. Este sería el Yin, y el Yan lo pondría una camarera aprendiz de actriz, rubia y voluptuosa al uso. Capítulo a capítulo vas conociendo la peculiar personalidad de cada uno de ellos y como desde su prisma se van enfrentando a la cotidianeidad. Uno de los personajes es Sheldom, un superdotado maniático y resabiado, con total desprecio a las normas sociales, capaz de decir lo que piensa sin el más mínimo miramiento. Hay un capítulo en el que a una velocidad de vértigo explica su peculiar visión del mundo de los Horóscopos. Me sentí graciosamente indentificado. En otro capítulo apareció con una camiseta que yo tengo. Y otra vez las risas cómplices. Cuando el superdotado evidenciaba alguna de sus manías compartida por mí, mi pareja se reía. A mí ya empezaba a no hacerme tanta gracia. Un nuevo capítulo y otra camiseta de mi colección. Mi pareja directamente se descojonaba. Pero cuando en alguno de la segunda temporada apareció con mi camiseta de la carta de ajuste, sonaron todas las alarmas. Por Jesucristo nazaranteno, por todos los pelos del bigote del Capitán Spock... ¡¡¡ soy un friki !!!
Os dejo algunas escenas: Regalos de Navidad, puro Sheldom, más Sheldom...

MICROS (HUMOR PROPIO)



25 de mayo de 2011

P.E.TRA.

Como estoy desencantado, he decidido hacer un partido. Además va a ser un partido muy coercitivo, hecho para prohibir. Lo llamaré...ummm...el PETRA (Parido de El Trastero). Nuestras bases iniciáticas son sencillas y se resumen en una palabra: Prohibimos...



- A los políticos corruptos participar en las instituciones.
- A los banqueros chuparnos la sangre.
- A las grandes empresas condicionar las decisiones de los gobiernos.
- Las injusticias.
- El hambre.
- La pena de muerte.
- La tristeza.
- La arrogancia.
- Los contratos basura.
- El maltrato animal.
- La violencia, con o sin género.
- El abuso, de autoridad y de cualquier otro.
- La intolerancia.
- La indiferencia ante el sentir ajeno.
- La burocracia.
- Las bombas y las armas de destrucción, con poco o con más IVA.
- A los dictadores.

¿Sigo?...


Desgraciadamente nuestro programa es uno de los más largos jamás presentados...

MICROS (HUMOR PROPIO)


24 de mayo de 2011

TÚ LA LLEVAS

El patio era mi hábitat y el "rescate" mi modo de vida. Todo un Messi escurridizo al que era imposible alcanzar. Premonitorio era mi gozo viendo a tanta niña correr desesperada tras de mí. Lástima, no tardé en comprobarlo, que esa tendencia no fuera para toda la vida; poco después, incluso, se invirtieron las tornas, cambiando el patio por los garitos del barrio. El caso es que guardo en la retina mis requiebros creyéndome el mejor. Pero no. El mundo de la empresa, oficilandia, me ha vuelto a demostrar que en juegos de niños sigo lejos de los mejores. Me he encontrado con verdaderos artistas del "tú la llevas" ¿En qué consiste? Los que trabajen en empresas medianas o grandes van a darme la razón, seguro. Suena el teléfono, en cualquier departamento y cualquier persona toma el aparato. El artista escucha y comprende rápido que el asunto no es suyo. Emite sonidos guturales a modo de finta y hace un dribling al estilo "le paso con". El problema es que no sabe quien lo puede resolver. Entonces decide tirar al bulto, ahí es donde el genio del "tú la llevas" empieza a mostrarnos su verdadero arte. El incauto receptor de la llamada escucha al artista. Es un dueto, una dicotomía "genio-ingenuo". Éste último no tiene nada que ver con el tema, pero por arte de magia, cuando se quiere dar cuenta, tiene al otro lado del cable al cliente, mosqueado con el baile, mientras el artista ha desaparecido de la escena. Con maestría, mano izquierda y chulería, ha ejecutado con toda precisión el complejo arte del "tú la llevas" laboral. Porque ahora, el marrón es tuyo. Hala, ingenuo, tú la llevas...

MICROS (HUMOR PROPIO)



23 de mayo de 2011

INDIGNAOS

Este fin de semana, en un pequeño rincón cacereño, me tomé un café con Stéphane Hessel. Me lo presentó mi admirado Jose Luis Sampedro. Hessel es un tipo adorable que se acerca al centenar de años con una lucidez brillante, un tipo de rostro alargado y afable, con pronunciadas arrugas llenas de vida, unas nevadas cejas y una media sonrisa cómplice que invita a escuchar. Me habló de las torturas que había sufrido tras la II Guerra Mundial, de los campos de concentración, de Buchenwald, de las veces que logró escapar, me habló de esa Europa valiente y fraternal de la post guerra a la que ahora se afanaba en buscar; de lo que necesita una verdadera democracia para serlo, de como montaron el Consejo de la Resistencia en Londres, de las Naciones Unidas, del miedo a los rojos que alimentó el fascismo y de que entonces era más fácil unificar la lucha porque había un enemigo común, tangible y con bigote. Me habló de los peligros de la indiferencia que surge del ¿para qué va a servir? o el ¿pero quién es el verdadero culpable? De la nausea de Sartre. De la distancia cada vez mayor entre ricos y pobres, de los derechos fundamentales del hombre, de los que fue partícipe, de la no violencia...Yo quise decirle que por fin en España los jóvenes, esos a los que habíamos condenado a la wii y a las redes sociales, habían decidido pacíficamente dar un golpe a la sociedad, un golpe real, alejado de las pantallas táctiles...pero entonces ya me había terminado el libro.

MICROS



Primero privatizaron la lluvia, pero nadie se preocupó...hasta que empezaron a subir el precios de los paraguas.

22 de mayo de 2011



-Hugo: ¿Por qué se ha roto la sábana?
-Mamá: Porque es muy vieja.
-Hugo: ¿ah, sí?¿y por qué es muy vieja?
-Mamá: porque tiene muchos años.
-Hugo: Ah, ¿y cuando es su cumpleaños?



Hugo, casi tres años.

MINIMOR



Aislado por el miedo tras el crudo
muñón donde enmudecen mis sentidos
de un lado soy la víctima impotente
del otro el Gran Hermano de mí mismo

disociación insana que negándome
el bálsamo piadoso del olvido
me va anegando a un tiempo de recuerdos
falaces que mintiéndome reescribo

panóptica ceguera en un destiempo
presente suspendido en el vacío
que arroja el porvenir a la alimaña
de un tiempo que pasó sin ser vivido

20 de mayo de 2011

JORNADA DE ¿QUÉ?

Nos obligan a pensar. Suena a cachondeo, la verdad, lo de la jornada de reflexión. Después de tirarse dos semanas invitándonos a no pensar ahora dicen pobrecitos, que se aturullan, vamos a dejarles un día para que se centren. Y la verdad es que dan ganas de hacerles caso y aprovecharlo, sí, pero para tomar impulso y calzarles un sopapo electoral que les deje temblando. Yo defiendo el “no voto activo” y global como forma de protesta, como culminación a este proceso de “vamos a darles una patada en el culo” que parece haber estallado con pausa pero con la intensidad de las cosas que perduran. La jornada de reflexión es un ninguneo más al ciudadano, al que le consideran incapaz de recibir soflamas y votar en consecuencia 24 horas antes. Esto me recuerda a la caducidad de los yogures: ¿ayer sí hoy no? La verdad es que, por ejemplo, un médico que ayer estuvo de guardia veinte horas, que realizó cuatro operaciones a vida a muerte y coordinó un servicio de urgencias con más de veinte profesionales en tensión, va a ser incapaz de ver una propaganda electoral mañana y no caer en la tentación de cambiar su voto. Ya estoy viendo a la eminencia babeando frente al televisor. Y no hace falta ser médico, o científico, basta con ser persona y adulta para tener las ideas claras. Ya puestos yo prohibiría las campañas electorales enteras ¡que descanso! Además, daríamos trabajo, una empresa externa y neutral se encargaría, por un lado, de recopilar las promesas electorales de la campaña anterior para hacer un balance de su cumplimiento y por otro sondearía los logros y gestiones realizadas durante los cuatro años tanto por el gobierno como los partidos de la oposición. Así tendríamos lo que tanto nos vendían en el colegio: la evaluación continua. Ahora que lo pienso, eso ya lo hacemos, no una empresa, sino todos y cada uno de nosotros. Ahora lo pillo, eso es lo que les da miedo, porque eso nos va a llevar a todos a Sol.

MICROS (HUMOR PROPIO)



19 de mayo de 2011

15 M

No hay excusas. No estoy ahí. También sé que diez años atrás lo hubiera estado. Por intendencia y por convencimiento. Ahora soy excépico al tiempo que me alegro y me emociono. Me emociono porque la juventud, una vez más, ha demostrado que los tópicos están para bailarlos. Cuando yo era joven se hablaba de nuestra "quinta" como una generación perdida (sigo odiando la "X"...) y entregada al ocio. Y yo me veía a las cinco de la mañana, camino del trabajo, y luego incapaz de encontrar sitio en la biblioteca de la facultad, y me reía. Ahora somos la cabeza visible del sistema productivo, tenemos que devolverle a la sociedad la desconfianza y nos ha tocado el marrón de la crisis, alimentada por los mismos que ahora nos miran con recelo. Me emociono leyendo las historias solidaridas, ese restaurante asturiano que acudió con una furgoneta, un enorme perolo de fabada y unas sidras para echar un cable. O el empresario que ha donado los baños químicos. O los bocatas que llegan a diario de nadie sabe dónde. Pero también caigo en la tentación del escepticismo y la desconfianza basada en la experiencia: leo como se están organizando en comisiones, subcomisiones, grupos, subgrupos, y ya me imagino las disputas, los recelos, los intereses encontrados y creo más factible la aparición de un Movimiento 15 M Verdadero que la pervivencia de este espíritu de lucha tan del 68. Me gustaría pensar que es un movimiento de izquierdas, pero tal vez no lo sea, tal vez sea de derechas, o de nada. Lo bueno es que es un movimiento. Una piedra. Ahora queda saber si la primera o la única. Aunque ya lo decía Galeano que las utopías sirven para seguir caminando, el optimismo a ratos te hace pensar que algo va a cambiar. Bajo los adoquines parisinos estaba la playa, lo que haya debajo de los de Sol (y otros "soles" de otras ciudades) espero que sea algo con F, con F de futuro. Estamos ahí incluso los que no estamos. Suerte. Nos la merecemos.
Algunas ideas con música.
Una página en la red.
El canal de videos.

MICROS (HUMOR DE OTROS)

18 de mayo de 2011

¡¡ VOLVER !!

Odio las páginas que pretenden dejarte encerrado. Entras con un link directo (que no abre una nueva ventana) echas un vistazo y cuando quieres volver, pues que no te deja. Das a la flecha de volver y nada, que patina el navegador y te quedas donde estás. Me ha pasado con la página de una editorial y no lo entiendo ¿Qué es lo que esperan?¿Que digas anda, si no me dejan salir, pues ya que me han encerrado voy a ver si les compro algo?¿Qué clase de ingenieros del marketing han ideado esta malévola e infalible estrategia de ventas por Internet? Es como si entraras a la FNAC, te das una vuelta, cotilleas, ves lo que hay y cuando vas a salir la puerta está cerrada. Es más, la empujas y en tus narices se te cierra sin dejarte salir. Tantas veces como lo intentes. Y tú, en lugar de llamar a la policía ¿vuelves a entrar y te llevas lo último de Reverte y un disco de El Combolinga? Pues no. Esto no funciona en la vida real, así que ¿por qué tenía que funcionar en la red? Es más, a nadie, seguro, se le va a ocurrir la siguiente vez abrir en una hoja o pestaña nueva y mandar a tomar bits a la página del bucle. Ahora que me doy cuenta yo sufro algo parecido, el #Mahou. Entro en un bar, pido una fresquita, me la tomo a la salud del torrezno de compañía y me voy hacia la puerta. Entonces la almohadilla me da un toquecito, me dice ¿otra? y chico, que casi siempre caigo ¿Unas Gildas con la birra? ¡ Hecho !

MICROS (HUMOR PROPIO)



17 de mayo de 2011

MALDITOS SOBRES

No conozco el caso de un solo ciudadano que haya decidido cambiar su voto gracias a un sobrecito electoral recibido en casa. No se me ocurre un perfil de persona, por muy indecisa que me la dibuje, capaz de decir anda, la leche, ya sé a quien votar, a estos que me han mandado propaganda. Ya pienso que los mítines están hechos para que los militantes y sus adorados tengan veinte segundos en directo en el telediario, porque ¿qué voto vas conseguir en una audiencia que se ha desplazado para aplaudirte con una banderita de tu partido? Pero en mi buzón no hay conexión en directo y en mi casa, como en la tuya, no le hacemos ni puto caso al sobre de marras ¿Por qué, ahora que estamos en crisis, a ningún partido se le ha ocurrido anunciar a bombo y platillo que como ahorro en estas elecciones no habrá soflamas postales? Ni tan siquiera I.U. que debería tener la sostenibilidad y la ecología por bandera; ayer mismo me llegó su sobre. Y lo peor de todo es que, dado el sistema de financiación de los partidos, estos sobres son un contra reembolso encubierto, porque la publicidad postal la pagamos entre todos. Basta ya, que den un paso al frente y ya que solo les importamos cada cuatro años, que al menos en ese periodo piensen en todo. Les ofrezco mi dirección de correo electrónico, con un email habremos salvado un árbol ¿no les compensa?

MICROS



LA CRISIS QUE SE MUERDE LA COLA: El formador para desempleados terminó de oyente en su propia clase.

16 de mayo de 2011

LOS ESPACIOS

Que importantes son los espacios. Y no me refiero en una metáfora sobre tu vida personal o como encontrar tus espacios privados en los que poder tomar aire. O cuando buscas aparcamiento. O en el diminuto colchón de la habitación de un hotel engañoso, para el que “cama de matrimonio” es un concepto muy ambiguo. No, me refiero al especio entre las palabras. Los espacios en la escritura tienen mala prensa, en realidad no tienen ninguna, son como los ceros a la izquierda. Un mal necesario del que nadie se percata. Es más, cuando cuentas el contenido de un texto ¿alguien contempla los espacios? No, los textos se cuentan por palabras. Pues yo reivindico aquí la importancia de los espacios. Y lo hago con una simple frase. Imaginad que recibís la comunicación de un cargo bancario con este texto: “hemos cargado en su estimada cuenta X euros”. La frase viene con sus espacios correctos y bien utilizados para el contenido formal, pero si uno le coloca un espacio más, sólo uno y, además, en un lugar estratégico, tratándose de un banco, tendríamos así el significado nominal de la frase, con intereses y gastos: “hemos cargado en su es timada cuenta X euros”. ¿Veis la importancia de un espacio? En los espacios entre palabras está la verdad…

MICROS (HUMOR PROPIO)



15 de mayo de 2011

LAS PREGUNTAS DEL PEQUE




Conversación real "robada" a Hugo (casi tres años) y Rubén (seis años y medio)




H: ¿Por qué se llama apisonadora?
R: Porque lo inventó un señor.
H:¿Por qué se llama coche verde?
R: Porque le puso nombre un señor así.
H: ¿Por qué escabadora?
R: Porque lo llamó así un señor ¿Sabes cómo se llama el que lo inventó todo?: Francés joven, que es el que inventó los nombres hace miles de años. Albornoz, toalla, secador...todo. Cuando murió Jesús él lo inventó todo. ¡ Mami ! ¿el Jesús ese es el que colgaron en la cruz? Pues ya no hay otro Jesús y su padre ya se murió. ¡ Mami ! ¿por qué muere la gente?...
H: Ummm, que agustito, ¿eh, Rubén?
R: ¿Me das un abrazo?




Prometo que esta conversación es real y no sacada de Amanece que no es poco...

14 de mayo de 2011

ARTÍCULO DE AYER:



Ayer no hubo trastero, y no fue culpa ni de los peques Larrey, ni del trabajo, ni de unos virus tozudos. Fue Blogger ¿qué pasó?, no lo sé, símplemente no funcionaba. Fui durante unas horas la versión bloguera de Enjuto Mojamuto...bloooooog, blooooog, blooooog...

LA MONEDITA DEL ALMA



"Moneda que está en la mano
quizá se deba guardar;
la monedita del alma
se pierde si no se da."

Antonio Machado

sin una monedita entre mis manos
que darte o que guardar en cuerpo y alma me ofrezco a ti completo o sólo en alma -como a un hijo una madre como hermanos-

si para que me aceptes por presente
debo dejar de lado el loco anhelo
de hallar entre tus brazos el consuelo
a esta carencia en que ardo álgida-mente

impón tus condiciones cualquier cosa
y acepta alma de mi alma esta moneda
sin calma en alma viva que te ofrendo

y gástala a destajo dadivosa
que al fin de este mercado si algo queda es darse alma a otras almas con dispendio

12 de mayo de 2011

AGUJETAS EN EL ALMA

Una vez al año nos ponemos el traje solidario. Mi empresa organiza a nivel mundial un día que llaman el caring day (día de la caridad) y cada sede emplea ese impulso solidario en función de su criterio. Nosotros hemos hecho de todo. Desde acompañar a un museo a un grupo de alumnos deficientes visuales, hasta hacer una recolección de libros y juguetes para una ONG que trabaja en Centroamérica, pasando por una donación masiva de sangre para Cruz Roja. Pero mis favoritos son los proyectos con los abuelos. Me niego a perder esa palabra por ultracorrección política. Abuelos, sí, abuelos. Me recuerda a mis tiempos en la residencia. Algunos dirán que es una forma de limpiarnos la conciencia de la modorra insolidaria del día a día. Puede. El caso es que la ejecución es inmediata, local y sin intermediarios, así que participo. Este año hemos ido, de nuevo, a una residencia a, literalmente, ayudarles en el pequeño huerto, arreglar el campo de petanca y pasar un rato, sobre todo, con ellos.
Muchos compañeros iban con el recelo que da la cuesta abajo de la vida, intentando impermeabilizarse ante la tristeza y algo asustados con las recomendaciones de la directora. Nada que yo no supiera. Y es que los abuelos son muy suyos y no debes ser invasivo. Han perdido en algunos casos las formas y no debemos llevar al terreno personal las respuestas fuera de tono. No las hubo. Ayudamos en el campo de petanca, como ilustra la foto, plantamos girasoles y nos echamos unas partidas de dominó. Y nos reímos. Y escuchamos, mucho. Porque nuestros mayores tienen tanto que contarnos y, encima, suelen tener ganas de hacerlo. Terminamos la fiesta con un bingo espectacular con piedras como fichas. Ya no estoy acostumbrado a los trabajos manuales, así que hoy tengo agujetas y una pequeña ampolla. Sí, agujetas, pero sobre todo en el alma, creo que también las llaman satisfacción.

MICROS (HUMOR PROPIO)




11 de mayo de 2011

S.P. R.I.P

Las carpetas de las niñas están de luto. Las paredes de sus habitaciones lloran gotelé amargo por la pérdida. La superpop impresa ¡ ha muerto !. Los padres, asustados, han guardado los tóner de sus impresoras láser por temor a hordas de granudos adolescentes en busca de la tinta para poder gozar de sus ídolos en dos dimensiones. Son tantos y tantos los rostros que han adornado sus portadas. Desde Camilo Sexto hasta Justin Bieber, pasando por los New Kinds o sus herederos los Backs. Todos, absolutamente todos los que pasamos de la treintena hemos hecho alguno de sus desastrosos y nulamente científicos test. Vale, lo hacíamos por estar cerca de ellas, por intentar adivinar qué pensaban y, por ende, qué posibilidades teníamos o qué nos teníamos que inventar para estar a la altura...¡ pero los hacíamos ! O los consultorios, versión infantil de Elena Francis, aquella era mi sección favorita. Recuerdo, no hace tantos años, una niña preguntaba: le he hecho una felación a mi novio y ha sentido el orgasmo sobre mi rodilla ¿puedo quedarme embarazada? Que yo pensaba, una de dos o no tienes edad para chupársela a tu novio o, hija mía, ya tienes edad para saber por dónde vienen los niños. Pues sí, esta mítica revista, sustento de las carpetas de las niñas que me hacían suspirar, ha muerto. Ahora tendrán que buscar en la red o en otras revistas esas fotos para llevarlas después al pecho presas del forro y el cartón de la carpeta. Reconozco que yo siempre fui del cine, pero no deja de ser una mala noticia, sea cual fuere su tema u objetivo, que una revista impresa deje de serlo. Descanse en paz.

MICROS



Era un político de grandes principios...pero de desastrosos finales.

10 de mayo de 2011

OBAMA BIN LADEN

Gracias al cine no me cuesta imaginarlo: el grupo de élite lo formarían, entre otros, un piloto con malas pulgas, algo entrado en carnes, un jefe que se las sabe todas, silencioso y empático con su gente; tal vez con un puro eterno al estilo Aníbal. Después estaría el grandullón musculoso que da galletas como panes, el delgaducho de mirada esquiva con más cicatrices que pestañas, que desde la primera pelea del patio no se ha perdido una guerra; el negro graciosillo que viene de un barrio obrero y que canta rap antes de saltar del helicóptero; y el latino guapo, que todavía tiene que soportar los chistes racistas de sus compañeros. Se lanzarían una noche, curiosamente en silencio, es la misión más importante de sus vidas. Con el sigilo de los profesionales llegarían hasta la supuesta mansión y con el mismo sigilo y la misma certera profesionalidad, con golpes que ni en mil años tú lograrías hacer, van cargándose a todos los vigilantes, hasta llegar a la habitación del asesino entre todos los asesinos. Durante la película, a modo de flash back, habremos sabido que el latino perdió a su mujer en las Torres Gemelas. Cuando lo encuentran, no puede resistir la tentación, y quiere entrar a matarlo, a torturarlo, a vengarse. El segundo de abordo lo detiene, pero entonces el jefe, que apaga el puro sobre un libro del Corán, le abre la puerta con una sonrisa cómplice. Hay silencio. El latino deja las armas y se adentra en ella. Después de que su jefe cierre la puerta comienzan a escucharse los golpes y los gritos a Alá. Fundido en negro y de nuevo el rostro del jefe, esta vez con traje de gala, sentando en un banquillo. No señor, no nos quedó más remedio que apretar el gatillo. Otro fundido en negro y la música de fondo de una banda militar. Imágenes del latino jugando en un típico parque americano con su hijo. La cámara se acerca a ellos, a sus cosas que descansan en el césped, hasta que termina enfocando un marco que como despistado andaba por ahí, con la foto de la mujer muerta...
He vivido engañado, pensando que las películas americanas eran ciencia ficción; pero no, parece ser que no, que estas cosas ocurren. Los cuerpos de élite y los asesinos justicieros existen.

MICROS (HUMOR PROPIO)



9 de mayo de 2011

SEVE

Corría el año 83 y yo me acercaba a los once años. Era de madrugada. Miguel Angel, Camacho, Juanito o Stilike luchaban por robarle la liga a Zubizarreta, Urtubi y Liceranzu. No tenía ni la más remota idea de lo que era un tee box, un green; el swing me sonaba discotequero y el putt prefería no pronunciarlo si mis padres estaban delante. La España del naranjito me había decepcionado tanto el verano anterior que imagino mi espíritu patrio necesitaba de nuevos alicientes. Así, una noche terminé a las cuatro de la mañana frente al televisor viendo a un santanderino que apenas me sonaba y que, como los pastores escoceses un siglo atrás, salvo que algo más elegante, se dedicaba a darle con un palo a una pelota en el suelo. Los nombres que manejaba el locutor, al que no recuerdo, me sonaban a clase de inglés mal digerida; y ni apretando las neuronas al máximo hubiera recordado haber oído hablar de Crenshaw o Tom Kite. Y por mucho que miré mi adorado Atlas no encontré ni sombra del Augusta National Golf Club, en Georgia. Pero allí estuve, sin saber porqué habían hecho 18 hoyos a un césped tan bien cuidado, pegado al sillón, si la emoción no me vencía y saltaba cuan forofo del club de campo, hasta que aquel muchacho de aire campechano y risueño se enfundó una chaqueta verde que, a lo visto, lucía como ninguna. Y le quedaba bien. Parecía hecha a medida de su grandeza...
Gracias Seve por este recuerdo.

MICROS (HUMOR PROPIO)



8 de mayo de 2011



- Ya me he ponido esto.

- Puesto, se dice puesto.

- Pues ya me he ponido puesto.



Hugo, casi tres años.

7 de mayo de 2011

COMO EL PERRO Y EL GATO



Tú amabas a los gatos Yo de ausencia
demente como un asno desbocado
seguí una dieta a base de pescado
azul -como tus ojos- La experiencia

con tiempo y grandes dosis de paciencia
obtuvo el resultado programado
en gato en 7 vidas se han mudado
mi vida y mi persona Qué inconsciencia

pensar que de este modo alcanzaría
a estar en tu regazo que podría
así lograr tu amor tu abrazo un beso

Había perro encerrado Y es por eso
que habré de echarte en falta 7 vidas
maullando de hambre y sed enfebrecidas

6 de mayo de 2011

MOMENTO INCÓMODO



Hay situaciones incómodas por naturaleza. Yo las llamo "silencio de ascensor". En las oficinas grandes los baños suelen ser un lugar de encuentro, y para quienes somos tímidos en los temas de higiene y evacuación, esto puede ser un problema. Y para no caer en la tentación escatológica gore, haré mi versión light del asunto con la higiene bucal. Los baños de una oficina son como la muerte: todo lo igualan. Allí desde el becario al director general van a hacer lo mismo. Da igual tu salario o la importancia de tu desempeño. Es más, hay una teoría todavía no contrariada que dice que cuanto mayor es tu salario menor es el asunto que tienes entre manos en el baño. Ahí lo dejo. El caso es que no sólo tenemos que compartir espacio "bañil" con compañeros con los que la rutina nos ha creado poco menos que un cuadrante, sino que hay que hacerlo con gente de fuera (auditores, por ejemplo) que nada saben de nuestras costumbres. Y ya me diréis, pero a no ser que seas Linda Lovelance hablar con un cepillo de dientes en la boca no es nada fácil ni para dar las buenas tardes. Y sacarlo de la boca no ayuda, porque la pasta formada en tu boca se empeña en salir al primer intento y prefiero no dar detalles de lo que parece eso. Así que intento buscar el momento. Sobre todo para el tema del enjuague, porque si ya con el cepillo es complejo mantener las formas y la educación, removiendo el verdoso líquido y con un saludo gutural nos podemos parecer a nuestros ancestros cavernícolas. Así que me meto en la parte del váter con puerta, y allí resuelvo las diferencias con mi placa. Pero claro, en ese momento puede entrar alguien, yo que sé, a lavarse las manos, y una de dos, o sales a escupir y después saludas con una sonrisa de inmaculada blancura, o esperas que no se alargue. Yo opté por el segundo. Pero se alargó. Y sí, reírse, que sé que lo estáis haciendo, pero cuando uno utiliza enjuague del bueno, del de los hombre, dos minutos con aquel infernal líquido en tu garganta es un martirio. Podía habérmelo tragado, pero estoy seguro de que hubiera dado positivo. Estuve a punto de rendirme y ya cuando el hiperhigiénico auditor consideró que sus manos estaban listas, salí y escupí con ansia el líquido del demonio. La garganta crionizada y con un aliento a menta que se podía sentir en el mismísimo África subsajariana. En fin, la timidez, es lo que tiene.

MICROS (HUMOR PROPIO)



5 de mayo de 2011

RUIDO

Toco el cajón, pichí, pichá. Y la batería. Mal. La guitarra. Casi peor. Y canto, de eso mejor no hablar. Me gusta poner la música bastante alta en el coche, mi cabina insonorizada particular, y destrozar las canciones de Sabina a grito limpio. Me pongo los cascos en el gimnasio. Podría decirse que me gusta el ruido. Pues no. Soy un maniático de los ruidos o un nacionalista del silencio selectivo. No soporto según que ruidos y sobre todo en según que situaciones. Por ejemplo: me enferma el ruido de la gente que abre la boca para comer chicle. No puedo. Sería capaz de cambiarme de asiento en el metro. O la gente que come en general con la boca abierta y habla y las ideas las aliña con restos de ensalada que vuelan más certeros que sus argumentos. Guardo en un cuarto oscuro de mis principios el rencor que le tengo a las decenas de personas que no me dejaron escuchar una película por el ruido de unas palomitas. No soporto dormir o leer con el tic tac de un reloj en la oreja. La secadora, que está en la terraza, termina su jornada sí o sí cuando llegan las doce. Me desvelan los tacones de la vecina. No me gusta la gente que canturrea las canciones guturalmente como si hubieran secuestrado con al boca a una cantante de gospel. Así es lógico que los tapones sean el mayor tesoro de mi neceser. En fin, que me gusta el ruido pero no. No me gusta, pero sí. En definitiva, el mundo es un bongó.

MICROS



No aceptes consejos, le aconsejó.

4 de mayo de 2011

SIGUE IGUAL

Esta mañana me he levantado y lo primero que me ha sorprendido es que el despertador haya funcionado con su odiosa puntualidad. Es más, había un locutor haciendo su trabajo. La ducha me ha regalado su agua. Mi familia dormitaba tranquila bajo la plácida calma del hogar. El coche (uf) ha arrancado. El quiosquero estaba puntual en su sitio y, es más, un tipo en furgoneta le había traído mucho antes la prensa del día. Hasta las calles estaban en su sitio y las farolas seguían alumbrando. Había más pobrecitos madrugadores por las aceras y en los múltiples coches que me he ido cruzando. He visto en un autobús media docena de personas mirando el despertar de la ciudad o tratando de arrancarle el último suspiro a Morfeo contra el cristal de la venta. Los paneles de la M30 continuaban dando sus indicaciones. Las salidas estaban todas en su sitio, como venas desperdigando los glóbulos de caucho y metal hacia sus puestos de trabajo. Mi oficina no se había derrumbado y la puerta me ha flanqueado la entrada con todo la diaria normalidad...Porque al final, pese al magistral pase de Iniesta, pese al teatro argentino, pese al increíble error, pese a lo bonito que es el fútbol, pese a que en definitiva siempre gana el mejor, pese a quien pese, la vida sigue igual. Unos más contentos que otros, pero la vida sigue igual...

MICROS



Un presente imperfecto no es pretérito indefinido para un futuro pluscuamperfecto.

3 de mayo de 2011

A PLAN



Es una de las frases que más veces escucho, sobre todo a cierta hora: No, gracias, estoy a plan. Antes no era tanto, pero ahora es que da igual la época del año, si no es por los excesos de la navidad, es por las torrijas o porque le vemos las orejas al verano en forma de lorza sobre la tira del tanga. Es generalizado entre las mujeres y ya muy común entre los hombres. Y dietas las hay para todos los gustos, que si la de la alcachofa, la Dunkan que nada tiene que ver con Rocío, la betabel, la del aceite de coco, la de los colores, la del melocotón en almíbar, la de la piña, la del requesón, la de los jugos cítricos o la de la papaya. Y yo sólo conozco dos dietas que de verdad funcionen: la del cucurucho, ya sabes, comer poco y darle mucho. Y la que está basada en el principio del filósofo José Mota: las gallinas que van entrando por las que van saliendo. Vamos, que si entran más de las que salen, el gallinero se atora. Nos gusta vernos bien, pero ¿de qué sirve un cuerpo reluciente, pero amargado y con ganas de comerse el mundo sin pasarlo por la turmix? Es cierto que cauno es cauno (y K2 una canoa), pero ¿no nos exigimos demasiado? Las mujeres sobre todo: guapas, elegantes, simpáticas, triunfadoras, buenas madres y siempre delgadas. A mí me lo parece. Nos gustáis, mucho, como sois y como estáis, ¿no os habíais dado cuenta?

MICROS

LUNES 8:05: Vamos, niños, arriba que no llegamos.

MARTES 8:06: Vamos, niño, a levantarse que es tarde.
MIÉRCOLES 8:12: Venga, venga, venga, arriba que llegamos tarde al cole.
JUEVES 8:15: Vamos, peque, a levantarse.
VIERNES 8:25 ¿Es que no me habéis escuchado? Arriba que no llegamos.
SABADO 7:29 Papi ¿ya es de día?¿podemos levantarnos?...