31 de enero de 2012

CHAPUZA 2020

Supongo que estaréis al tanto. Ya tenemos los madrileños logo para prolongar el sueño olímpico del Ministro de Justicia y a la sazón ex alcalde de nuestra ciudad. Sin entrar en cuestiones que no me competen sobre la calidad del mismo, sí que hay algo que me gustaría comentar. El proceso. Al parecer el logo definitivo tiene poco que ver con el original y premiado en concurso público, cuyo autor era un joven estudiante de diseño. Finalmente una empresa privada ha retocado esa idea original para regalarnos el que ahora figura como emblema de la causa. Bien, es cierto que en las bases ya se incluyen claúsulas relativas al retoque del ganador. Pero el proceso, desde la perspectiva de un humilde servidor, es el siguiente: logramos curarnos las espaldas dando un premio irrisoio a un estudiante que se presente y nos "regale" un diseño, y luego de las arcas públicas sacamos un pasturrial para que una empresa privada de diseño que a su vez es de un primo de un amigo de un sobrino, nos lo joda, lo deje irreconocible y así todos contentos. Y el que diga que esto no es así que lo demuestre. País de pandereta, amiguismo y chapuza. Que condena, coño, que condena.

MICROS (HUMOR PROPIO)

30 de enero de 2012

AMOR EXTREMO

¿Recordáis la película de Denzel Washington en la que como padre se ofrece a morir en la mesa de operaciones y ser donante de corazón para su hijo? Se llamaba Jonh Q. Además de hacernos reflexionar sobre lo maravillosa que es la Sanidad Pública como concepto, nos pone a todos, sobre todo a los que ya somos padres, en la piel desesperada de quien haría cualquier cosa por un hijo. Esa es una prueba de amor extremo. Pero en el día a día, en nuestro andar cotidiano, estamos repletos de pequeños detalles que, en algunos casos, también son pruebas de amor extremo. Os cuento un ejemplo: salida del cole, los peques disfrutan de los últimos rayos de sol en el parque. Eso es incompatible con una atención directa a la merienda, y como el juego tiene tantas proteínas o más que el atún y el chocolate estás ahí, como una estatua, con las meriendas en la mano mientras tus hijos van del pilla pilla a las viandas, de las viandas al pilla pilla. Y entonces te fijas. Son redonditos, oscuros y brillantes al sol de invierno. Te llaman como cantos de sirena, vamos, no te cortes, somos tuyos. Pero no, tú, como Jonh Q estás dispuesto a darlo todo. Así que contienes tus impulsos y los dejas. Por que sí, amigos, tener en la mano los donuts de chocolate de tus hijos, estar muerto de hambre y no darles un mordisco ¡¡¡ también es una prueba de amor extremo !!!

MICROS (HUMOR PROPIO)

28 de enero de 2012

MÁS ALLA DEL ÉXODO

FILOLOGÍA

Lamer palabras tiernas susurradas

en bable inglés francés maorí italiano

oh yes my god mais oui mon dieu santa madonna la trémula sonrisa vertical que aun mudo en su elocuencia es el más fértil lenguaje sin fronteras esperanto origen meta y hálito de vida

27 de enero de 2012

¿UNA GRAN FAMILIA?

Nos hacen creer que el Estado somos todos, pero como decía aquel, unos más que otros. Así Papá Estado debería velar por que entre los miembros de su familia reine la concordia, la igualdad y la unidad familiar reme en la misma dirección para no estancar el barco. En una familia de verdad, y ya sabéis que me paso por el forro de los mísmisimos lo que Rouco y su piara de trasnochados considere una familia, digo, en una familia de verdad eso ocurre. En los momentos difíciles, en los momentos de crisis, se hace una piña y esa unidad familiar se transforma en una molécula indivisible. Y si es el dinero lo que escasea, tened por seguro que sabrán de donde recortar. Irán de lo más prescindible o lo más necesario. De este modo, cobijo, alimentación, salud y educación serán lo último que un padre y una padre recortarán de presupuesto. Y sé de lo que hablo, todos conocemos familias que hacen auténticas locuras financieras para que su hijo acuda a una terapia. Y no creo en el Estado, no porque la teoría no me la sepa y no la asuma, sino porque cuando las pintan calvas da igual que la brocha la lleven los que pintan de rojo que los que pintan de azul, al final siempre se recorta del mismo sitio, justo de lo que jamás, jamás recortaría un padre. Recortan en sanidad, recortan en servicios públicos, recortan en educación, pero no recortan las prebendas de los grandes asalariados patrios, ni meten mano de forma contundente a quienes más tienen para que devuelvan a la sociedad parte de lo que ésta les ha dado. Es como si un padre le dijera a su hijo lo siento, no tenemos dinero para comprarte libros, que la cosa está muy mal, y ahora déjame, que tengo limpiar mis palos de golf. Sería ridículo si no fuera porque es triste.

MICROS

Lo más triste fue que la primera vez que recibió flores se las mandó su marido desde la cárcel y ella las recibió en su tumba.

26 de enero de 2012

SIN TIEMPO

Soy un escritor de escaramuzas. Quisiera ser un guerrero profesional pero no soy más que un dedillos de mal teclado. Me gustaría volver a los tiempos en los que escribir me ocupaba horas cada día. Pero no se puede, La Confederación de Paises del Día a Día me tiene secuestrado y no puedo enfrentarme a su ejército de la pantalla en blanco con tiempo, energías y soldados. Y por eso tengo que dejarme las pestañas en las escaramuzas. Así cualquier momento es bueno. Antes uno se preparaba como quien sale a torerar, con su protocolo, con su vestimenta, con su luz, sus apuntes, su arte...ahora no, ahora aquí te pillo aquí te escribo. Pum. Pam ¿Diez minutos? pues diez minutos ¿Cinco? pues cinco, hay que aprovechar cualquier despiste del enemigo para ganarle un párrafo. Si antes no me merecía la pena mancharme el talento para media hora, hoy soy capaz de meterme en el barro de las ideas por cinco minutos. Así las musas son más traicioneras que nunca. Agentes dobles que bien pueden mimarte en la diminuta guerrilla como puentearte el día que pensabas ibas a librar la madre de todas las batallas. Entonces las maldices, porque ver a tus veinte soldados nerviosos, esperando, frente al teclado, reclamándolas, se te hace más duro cuando sabes que apenas te queda tiempo para huir. Musas, por amor al arte, no me seáís tan cabronas.

MICROS

25 de enero de 2012

PAÍS DE PANDERETA

Algo huele mal y yo he tirado de la cadena. Pareciera que a este país se le atascara el sumidero en la transición y no haya soltado toda la mierda. Que un político que si bien participó activamente en la creación de los pilares de la actual democracia (¿ejerciendo de lastre?) y en la intocable y trasnochada constitución que nos alumbra, pero que sobre todo fue un político muy participativo y con elevadas responsabilidades en una dictadura que como todas las dictaduras (y esta durante ¡40 años!) hizo de la represión y la muerte su denominador común, que un político como él, digo, haya muerto con todos los honores...Y en cambio, el único juez que tuvo las pelotas de cantarle las cuarenta al pasado franquista, de levantar la tierra para remover conciencias, esté en un banquillo acusado de la osadía de sentirse en derecho de juzgar lo intocable. Que esto pase en mi país nos retrata. Nos humilla. Nos delata. Algo huele mal cuando un político franquista convencido va a terminar teniendo una calle en la ciudad en la que vivo y un museo en su pueblo y el juez que puso sobre la mesa la evidencia del dolor y el olvido de la dictadura vaya a tener que dejar de ejercer su profesión. Es una vergüenza insoportable que asusta. Que los grupos nostálgicos y de ultraderecha sean capaces de encontrar resquicios legales para acusar a un juez como Garzón pone en duda la eficacia del sistema. Está claro que España no se decide a soltar la pandereta...y la culpa es de todos. Por acción u omisión, esa pandereta es de todos.

MICROS (HUMOR PROPIO)

24 de enero de 2012

LA TENGO MÁS GRANDE

¿Cuantos brazos no se habrán roto por el orgullo masculino? Y no hablo de violencia de género. Me estoy refiriendo a los gimnasios, esos lugares del demonio donde la testosterona le echa una partida de póker al deltoides y el biceps se convierte en una prolongación del pene. Esos lugares, con sus sofisticadas máquinas de tortura, esconden momentos muy duros para el hombre común, ese que convive con su lorza y saborea una cerveza sin demasiados remordimientos. Esos hombres no tatuados, con  camisetas de publicidad de bebidas o películas pasadas de moda, pantalones de marca indefinida y zapatillas multitarea, que son las mismas con las que sale a correr, a comprar el periódico o a darle a los pedales. Porque en los gimnasios uno no es dueño del espacio, lo que te obliga a compartir máquinas. Entonces ocurre. Es ese momento en el que el usuario anterior, ese tipo con brazos como cabezas, termina su serie, se levanta y con una sonrisa te mira como diciendo, hala, si tienes cojones te sientas. Y entonces llega el gran dilema. Por que sí, hay que demostrarle al mundo que la tienes más pequeña, sí, mucho más pequeña...la ristra de pesas que vas a levantar. Así muchos dirán, yo anque me deje el brazo tiro con lo mismo ¡ Qué cojones ! somos españoles, nosotros, con dos pelotas, ponemos otra más, como diciendo, perdona, musculitos, deja, que ahora le toca a los hombres. Y te sientas y comienzas a tirar, y no hablas, claro, por que si hablaras te fallarían las fuerzas y el peso te desolocaría el hombro, que dadas las circunstancias no sería un mal mayor, porque por lo menos dejarías de sufrir, pero te preocupa que se te desprenda un trozo de hueso y ahora que todavía no tienes el seguro de responsabilidad civil, le saque un ojo a alguien. Pero si pudieras hablar le dirías que vas tan despacio porque es así como se logra de verdad el músculo y que tu cara de fresón a punto de explotar es una pose de humildad. A la segunda repetición tu brazo dice que una cosa es estar contigo en los momentos onanistas y otra esa inhumana tortura. Así que lo dejas. Y te levantas chasqueando la lengua y moviendo los brazos como molinillos. Tuerces el gesto como diciendo maldita lesión, me tiene frito, y te vas, lejos, muy lejos. A mí eso no me ocurre, yo espero en la sombra a que la máquina quede libre y, como un delincuente, hago mis series sin dejar el más mínimo rastro.

MICROS (HUMOR PROPIO)

23 de enero de 2012

V ANIVERSARIO

Cinco años. Se dice pronto, pero es mucho para un blog personal. En enero de 2007 escribí mi primer artículo. En realidad no sabía muy bien dónde me metía y hoy jalonan este rinconcito cibernético más de mil pensamientos, más de mil relatos breves, centenares de frases de niños, yendo camino de las 200 mil visitas...Y no es eso lo que me abruma, lo que me sorprende es que, a día de hoy, casi 150 personas se pasan cada jornada para leer lo que escribo. Y que mis primas, las del pueblo, lo hagan, o lo hagan los amigos de siempre, algún que otro familiar despistado, mis compañeras del trabajo, las niñas de Momo, los colegas de la uni, hasta algún que otro viejo amigo del colegio o del barrio, e incluso nuevos que ni conozco porque somos amigos de caralibro, o mi amiga la australiana ¿eso? eso es lo que uno espera. Lo que de verdad me impresiona es saber que el segundo país, después de España, como origen de visitas es Mexico. No conozco a nadie que viva en México. Como tampoco conozco peruanos, colombianos, chilenos y apenas un par de personas que vivan en Argentina, y dudo que sean mis lectores. Pues de todos estos países llegan a El trastero. Incluso de Estados Unidos. Son gente que, por alguna razón, cayeron en la red tendida por El trastero y se quedaron atrapados. Me gusta. Es una responsabilidad, siempre lo he dicho, estar a la altura de mis lectores.
Pero me gusta, como escritor (o eterno aprendiz de) no puedo más que asumir el reto...
¡ Vamos a por el VI aniversario !
GRACIAS A TODOS 

MICROS: HUMOR PROPIO

22 de enero de 2012

LAS PREGUNTAS DEL PEQUE

HUGO: Si viene un malo lo matamos.
PAPÁ: No, llamamos a la policía.
HUGO: Eso, y entre los tres le matamos.

Hugo, tres años y medio.

21 de enero de 2012

MÁS ALLÁ DEL ÉXODO

NOCTURNO



¿Te piensas mi verdugo?

¿que estos pingajos fatuos

de luz deshilachada

que cuelgan de mis ojos

son fruto del mordisco

de tu rictus sombrío?

¿que esta elegía exánime

que entono en tu regazo

es el postrer tributo

como óbolo que ofrendo

sin hálito a tu brío?

¿te piensas...? ¿qué te piensas

en tu necia soberbia

inmune a la derrota?

¿en tu estéril conquista

de páramos quemados

premeditadamente?

¿Acaso que este trémulo

sudor que me va helando

lo ha parido el espanto?

¿te piensas...? ¿qué te piensas?

el dolor es celeste

tú un misericordioso

lenitivo amarillo

20 de enero de 2012

KODAK

Los tiempos cambian. Hoy a nadie se le ocurriría poner una lechería, pero cuando yo era pequeño no había barrio sin su lechero. A nadie en su sano juicio se le ocurriría ahora montar un videoclub, pero en mi adolescencia Blockbuster era una franquicia potente ¿Pero Kodak? Kodak está asociada a mi despertar por la fotografía. El día que Dios invadió mi cuerpo mandando a su hijo en forma de oblea (para otro artículo dejaré como también terminé sacándolo a hostias...) me regalaron una cámara Kodak. Era una pocholada técnica para su época, rectangular, hacía la foto cerrándola por los lados. Especial para fotografías en movimiento. No la usé mucho, la dependencia económica hacía inviable mis experimentos fotográficos ¿y para esto nos gastamos un dineral en revelado? Pero mucho tiempo después el carrete Kodak y yo nos fusionamos en uno. Con mi Yashika reflex destrocé mis presupuestos y a lomos de las películas Kodak descubrí el mundo desde un obturador y un diafragma, desmonté la realidad en decenas de miles de fotos, pentaprismeé el universo en incontables clics analógicos. Y siempre, siempre, con Kodak como cómplice necesario. Ahora la empresa que puso la película para mis sueños fotográficos ha entrado en quiebra y es muy probable que desaparezca. A Kodak se le acaba la plata, se le agota el carrete. La era digital y su negativa a subirse al carro va a dar el traste con más de 120 años de tradición fotográfica. Es la vida, supongo, pero mi más sincero pésame.

MICROS (HUMOR PROPIO)

19 de enero de 2012

FUTBOLEROS

Llegó un día en el que había que tomar una decisión. Hasta entonces podía nadar entre aguas tan dispares como la bahía Mágica de Cádiz o el Atocha de Arconada. Pero uno se hace mayor y quiere identificarse con los demás. Entonces pasaban por allí Butragueño, Michel, Pardeza, Martín Vazquez heredando el cosquielleo que me habían dejado Camacho, Santillana o Gallego. Así que sí, puedo decir que soy racionalmente del Madrid. Voluntariamente madridista. Lo que tiene un lado bueno: sufro menos. Y una lado malo: también disfruto menos. Soy lo que entre los forofos se conoce como un chaquetero, un aficionado garrafón. Lo que me preocupa es la inmediata y eterna identificación ¿estoy obligado a que me identifiquen para siempre con todas y cada una de las personas que se pongan esa camiseta?¿me están condenando a compartir principios con Pepe? ¡ eso no es justo !¿Qué tengo yo que ver con tipos que ni me conocen ni quieren conocerme y pasarán por aquí camino de algún lado sin saber lo que somos? Esto es un deporte y aunque mueva millones, un juego, un maldito y simplón juego en el que 22 tipos multimillonarios en calzoncillos, como si fueran pesacadores y el balón un mero redondo, tratan de meterlo en una red. Pero ¿orgullo?¿besar un escudo?¿morir por una camiseta? No en mi nombre.

MICROS (HUMOR PROPIO)

18 de enero de 2012

LA ABUELA Y MI PERILLA

Me encantan las historias de abuelos. De mi más de año y medio trabajando en una residencia aprendí que la ancianidad es una especie de vuelta a la infancia. Y es cruel, porque supone la pérdida de algunas cosas importantes, como los recuerdos, o la memoria y hasta la cordura. Pero en algunos momentos llegan a ser adorables. Y gente que quiere y se deja querer con una facilidad superior al resto. Hoy me he acordado de mi perilla. Cuando ejercía de gerocultor (y no aparcayayos, como decían mis compañeros de la universidad) llevaba el pelo bastante largo. Estaba en el servicio de fisioterapia, y además de ejercer de Ciceron para subirlos y bajarlos al ejercicio diario, les ayudaba de forma activa durante la tarea. Así tenía cada día y a cada hora una cita con alguien. Casi siempre mujeres, mucho más activas y receptivas a las terapias no obligatorias. Lunes, miércoles y viernes Celestina a primera hora. Martes y jueves, Julia y Alicia. A las once los viernes y martes Agustina y su marido a la bici...en fin, iba y venía trayendo abuelos para que lo dieran todo en la sala de fisio. Una de ellas era una mujer que superaba con creces los 90 años. Simpática, gallega si no recuerdo mal. Metro cincuenta llenos de sonrisas. Pelo canoso siempre recogido en un moño que cada mañana, antes de que llegara el autobús, le preparaba su hija. Yo estaba con ella mientras iba y venía en las paralelas. Hablábamos de lo humano y de lo divino, porque hablando el ejercicio salía mucho mejor. Ella estaba convencida de que yo era una mujer. El pelo largo y el pijama morado no ayudaba mucho, la verdad. Pero ni jurando y perjurándole que era un hombre salía de su idea. Por aquel entonces decidí dejarme perilla. El primer día esta buena mujer no dijo nada. Hicimos los ejercicios, hablamos de nuestras cosas, y yo me di cuenta de que no dejaba de mirarme a la cara. Así un par de días más hasta que el tercero o cuarto empezó a tocarla, como si no se terminara de creer que existiera esa ristra de pelos junto a mis labios. Me miraba, la tocaba y se reía, hasta que ya le pregunté ¿no te gusta mi perilla? y ni corta ni perezosa me contestó: para una mujer no...Lo dicho, adorables.

MICROS (HUMOR PROPIO)

y si no al tiempo...

17 de enero de 2012

IL SIGNORE CAMPS

Es una lástima que Los Soprano haya terminado, porque Camps, su Ilustrísimo Chorizo, se merecía un cameo en la serie. Ya me lo imagino en la gran cocina de la casa, sentado junto a la mujer de Toni, compartiendo un café y esperando a que éste baje a por el periódico, en batín corto y calcetines blancos. Toni saludaría con familiaridad, iría a la nevera a por un poco de zumo que bebería directamente de la botella, besaría a su mujer, que desaparecería de la escena y se sentaría junto a Francisco (Francis en la serie, para disimular). Espero que traigas buenas noticias, diría el mafioso mordiendo un trozo de salami. Sí, tranquilo, sonreiría nervioso Camps, el traje ya está en el tinte. Ah, te he traído el libro que me pediste. Y sobre la mesa dejaría un ejemplar de "La rutina antigua de los hombres perversos" de René Girad. Sí, este tipo se merece un cameo. Su chulesca actitud durante el juicio que puede cambiarle la vida, sino fuera porque raya el infantilismo con una vergonzosa desvergüenza, se acercaría a la actitud tantas veces vista en el cine de esos mafiosos que se ríen de la justicia por que la suya es otra. Esa chulería que con un toque a chapela hemos visto en algunos cherokees del norte. La cara de falsa concentración de Camps durante el juicio es una caricatura de nuestra democracia. Este tipo de traje y sonrisa de serpiente, es un grano en el culo del nuevo gobierno. No se lo han extirpado porque las hemerotecas son muy hijas de puta y tienen la costumbre de guardar las meteduras de pata para escarnio de quien tiene la costumbre de rodearse de quien no debe. Pero tengo la impresión de que Camps se está quedando sólo en su interpretación, que cuando la justicia ejecute su, esperamos, imparcialidad, no habrá quien pida un bis. Sinceramente creo que estaría más a tono con las circunstancias que mañana apareciera leyendo "El niño del pijama de rayas", de Boyne, porque con lo que le gustan los trajes a este tipo me encantaría ver qué tal le sienta uno carcelario. Si Mario Puzo levantara la pluma reescribiría "El siciliano", seguro...

MICROS

Ójala pudiera seguir soñando con ser mayor, pensó cuando ya lo era.

16 de enero de 2012

MIEDO

Un policía fuera de servicio, muy lejos de su casa, trata de ayudar a una mujer que parece estar sufriendo una agresión por su pareja ¿Resultado? el policía en el hospital y la pareja sigue a lo suyo, en esa espiral de amor violento y resignado que jamás lograré entender. Me pone triste porque me da miedo. Desde que soy padre mucho más. Creo que, contra mi naturaleza, si volviera a presenciar algo así huiría. Y digo volvería porque hace muchos años ya tuve mi primera dosis de realismo. Ocurrió hace casi dos décadas. Era verano, en el bar de unos amigos. Un grupo de lo que para nosotros entonces eran cuarentones entró a última hora. Tres parejas. Uno de ellos muy borracho. Como era de esperar el apura vasos terminó por liarla. Ayudé a mis amigos a sacarlos a todos del local. Hubo sus más y sus menos a nivel verbal entre el grupo y los dueños y aledaños. En un momento de la trifulca dialéctica, con el borracho en su salsa, una mujer trató de serenarlo, tirando de él por el brazo. Entonces se dio la vuelta y sin mediar palabra la tiró al suelo de un puñetazo. No creo que entre el puñetazo y mi reacción hubiera más de unas décimas. Con la agilidad de un tipo deportista de veinte años y creyéndome Robin Hood, me lancé sobre el imbécil para explicarle a trompicones como debe tratarse a las personas en general y a las mujeres en particular. Sí, fue un acto machista, porque si hubiera pegado a un amigo me hubiera quedado a disfrutar del espectáculo. Pero pegó a una mujer. Entre varios lograron que mi cólera no me llevara a mayores y cuando nos separaron, la mujer, muy airada, me escupió a la cara que era su marido y podía hacer lo que quisiera. Aprendí. Prometo que aprendí aquella vez a meterme el espíritu justiciero en el bolsillo de las frustraciones. Y sucesos como los ocurridos con Neira o este buen hombre en Alcorcón, me reafirman en mis enseñanzas. Y es malo. Muy malo. Desnaturalizarnos. Deshumanizarnos por miedo es muy, muy malo. Pero es lo que hay.

MICROS (HUMOR PROPIO)

15 de enero de 2012

LAS PREGUNTAS DEL PEQUE

PAPA: Mirad, el sol y la luna juntos en el cielo.
HUGO: Eso es porque se quieren

Hugo, 3 años y medio.

14 de enero de 2012

DEL VERBO NO NACIDO

“si quedara esperanza”

Josefa Parra

con hálito enlutado
y sal en las pupilas
visita cada ocaso
la tumba donde yacen
los huesos de sus sueños


jamás les lleva flores
no crecen sobre el páramo
que humilla el desaliento
armado con la pólvora
mojada del recuerdo
de un tiempo sin promesas
ni citas con la carne
que no da opción alguna
a la resurrección
de su agostado anhelo

por eso nada espera
y ahora que al fin comprende
que fue un necio un iluso
sin chance ni motivos
para su afán quimérico
de hinojos en su duelo
se funde al fuego fatuo
que emana del destiempo
y entona su elegía
cautivo en el silencio
gimiendo como un perro
cuando al salir la luna
refleja sobre el mármol
con polvo por sudario
la imagen de su espectro

con su hálito agotado
de bruces cada noche
se rinde desplomado
al yermo donde yacen
los huesos de sus sueños

13 de enero de 2012

SOMOS BUENOS

Era última hora de la tarde. Salíamos mis hijos y yo de música y junto al coche había un bulto negro. Con desconfianza lo toco con el zapato. Es un bolso. Parece cerrado. Lo cogemos. Le explico a mis pequeños que alguien lo ha perdido. Dentro la documentación, pastillas, el bonotransporte, el monedero con dinero y por suerte, un teléfono. Busco en las últimas llamadas un nombre que me permita acceder a su dueña: Toni vecina. Llamo. Explico que me he encontrado el bolso. La mujer no está y vive no lejos de la escuela. Pero es tarde, así que se me ocurre decirle que voy a dejar el bolso en una comisaría cercana. Ah, fenomenal, me indica la vecina, su marido es policía, seguro que la conoce. Así que, allá que vamos la familia Larrey a dejar el bolso en el centro policial. Mis hijos lo ven todo con naturalidad, un pequeño alto en el camino para hacer un favor antes del baño y la cena. En la comisaría nos miran con una amplia sonrisa, es como si estuvieran viendo al mismísimo Papa Noel. Después les explico a mis hijos que lo que hemos hecho es algo bueno, le hemos evitado a una persona el engorro de tener que volver a hacer todos sus documentos, anular las tarjetas y si los policías son horandos (no veo por qué no) no habrá perdido ni el dinero que tuviera. Y a nosotros, en el fondo, nos ha costado bien poco, menos de un cuarto de hora de nuestro final de día. Ellos, repito, lo vieron todo con suma normalidad, y precisamente de eso se trataba. Ya, lo sé, hay una ley no escrita que nos permite, en estos casos, quizá quedarnos con el dinero como impuesto revolucionario, porque el dinero no tiene dueño si está en la calle, y la mujer lo hubiera dado por bien invertido. Pero no, yo no soy así, y delante de mis hijos muchísimo menos. Lo que tuviera esa buena mujer en el monedero es el precio que me cuesta a mí enseñarle a mis hijos, de la mejor forma posible, con el ejemplo, lo más importante en esta vida: a ser buena persona. Cometí el error, eso sí, de no dejar un teléfono en comisaría, estoy seguro de que la señora hubiera estado encantado de llamar para dar las gracias. Aunque visto así, un poco de misterio me parece una hermosa guinda para esta sencilla historia. 

MICROS (HUMOR PROPIO)

12 de enero de 2012

EL LADRÓN DE BICICLETAS

Una jaimitada compuesta, esto es, dos acciones propias de Jaimito concatenadas, me llevaron al trastero de mi casa con un serrucho para hierro. No era una versión cañí y carabanchelera de Dexter, sino un tipo con una cadena encadenada, y nunca mejor dicho, al manillar de su bici. La escena tenía algo de Saw, porque había que elegir, o acabar pronto con aquella tortura (cortando el cable del freno) o hacerlo bien y dedicarle tiempo (cortando la cadena). Opté por la segunda. Las dos jaimitadas mencionadas fueron colocar la cadena en el manillar pillando también el cable, y después perder las dos llaves. El serrucho, alejado de la profesionalidad tres calles (las que separan mi casa del Chino donde lo compré) no auguraban un trabajo fino y rápido, así que me despedí de mi familia como el que parte a América. Después, cual fue mi sorpresa, cuando aquella herramienta garrafón y algo de mi tesón y pericia, lograron partir la cadena en lo que tarda el temporizador de un pasillo en apagar la luz. Menos de un minuto y me había robado mi propia bici. Eso me explicaba muchas cosas. En realidad estas cadenas no sirven para asegurar la bici contra ladrones, sino para evitar que alguien se la encuentre, tirada por la calle, y se la lleve. Porque si yo con un serrucho que más parecía una segueta para cortar madera necesité menos de un minuto ¿qué necesitarán dos ladrones profesionales con su cizalla y su furgoneta al relentí? Y es curioso, porque si vas a una tienda a comprar una cadena más gruesa ¿sabes como te la preparan? cortándola allí mismo, con una cizalla que, por cierto, también venden, dos estantes más al fondo. En realidad no nos roban las bicis en la calle no porque no puedan, sino porque no quieren o por que están robando otra. Y lo dice uno al que ya le han robado dos, y una de ellas la llevo marcada a fuego en el corazón, porque sigo pensando que aquella California X2 era la mejor bicicleta del mundo. Espero que el insensible que me la usurpó la disfrutara al menos la mitad de lo que yo la hubiera seguido gozando.

MICROS (HUMOR PROPIO)

11 de enero de 2012

FRASES

Hay frases o acciones que son involuntariamente ilustrativos. Por decirlo de algún modo, rompen la baraja. Hace años trabajé en una residencia. Normalmente, cuando entraba un nuevo miembro todos los componentes del equipo teníamos la premisa de ir valorando su estado de salud y su nivel de cordura. Hubo una mujer que pasaba de largo los 90 que a todos nos sorprendió por su simpatía, sus ganas de vivir, su alegría y su movilidad. Respondía a todas las preguntas sin dudar, con coherencia y lógica. Estábamos en un tris de determina que se encontraba perfectamente cuando llegó la pregunta y la respuesta que lo cambió todo. Llevaba un bonito moño que sabíamos no se había hecho ella, así que una enfermera le preguntó ¿quién le ha hecho ese moño? y la abuela, sin dudarlo, como si fuera una respuesta evidente, nos dijo: pues mi madre ¿quién si no? Es como si en una excavación arqueológica en el séptimo estrato encontraran una lata de cocacola...ya nada vale. Dejo otro ejemplo personal. Hace también algunos años sufrí durante un breve tiempo el acoso de algún aburrido que me amenazaba por email. Cuando mencionó algunas cosas personales (no existía facebook entonces) pensé que había, por lo menos, que dejar evidencia, y me fui a poner una denuncia. En la comisaría me pasaron con el experto en delitos informáticos. Un tipo joven, que me hizo las preguntas lógicas, dejándome entrever que era un persona que conocía ese mundo. Después de hablar unos minutos se puso a redactar la denuncia. Entonces llegó el turno de escribir el correo en el que había recibido las amenazas. Vi como paraba de escribir y su dedo, como un aguilucho revoloteaba por encima del teclado. Supe inmediatamente que buscaba, así que acudí en su ayuda: alt gr 2, la arroba está en alt gr 2. No sólo supe lo que buscaba, sino que el moño se lo había hecho su madre.

MICROS (HUMOR PROPIO)

Por problemas técnicos, que se resumen en un "¿pero qué cojones pasa?" no puedo subir la foto del micro de hoy...

10 de enero de 2012

LOS TRES REYES BLANCOS

El fin de semana estuvimos viendo a nuestro sobrino en Mejorada, en un campeonato de fútbol. Ambiente familiar y deportivo y sana rivalidad entre barceloneses, sevillanos y madrileños. Panceta y cerveza. Mientras se jugaban las semifinales, con los niños dándolo todo, aparecieron por el polideportivo, entre la pista de atletismo, tres cochazos negros, tres audis impresionantes, que aparcaron junto a una de las porterías. Pensamos que era una promoción de Men in black. Obama no era, porque faltaba el mosquito sobre nuestras cabezas y una docena de coches militares. Pensamos tal vez en nuestro presidente...pero claro, al ver la decisión con la que entraron los coches, sin dudar, directos a su destino, estaba claro que Rajoy no era. Después vimos el revuelo general, con toda la chiquillería corriendo como locos. Sobre todo las niñas y las madres. Entonces nos dimos cuenta de que se trataba de gente importante. Y efectivamente, tres jugadores del Real Madrid: Callejón, Granero y Adán. Nos explicó un amable lugareño, porque los lugareños siempre gustan de explicar las cosas, que Adán era del pueblo y apadrinaba el torneo. La locura fue generalizada y mi hijo estaba como loco porque le firmara un balón. La verdad es que no soy partidario de estas locuras y nos mantuvimos en segundo plano. Me gusta verlos en el campo, no a todos, pero fuera son tipos de los más normales: Adán un mozalbete enorme con cara de buena persona, Callejón un macarrilla de barrio que bien pudiera llamarse Jonathan y tener un padre con fregoneta, y Granero, pues que si te lleva el correo a casa es probable que ni te fijes en si tiene el pelo largo o corto. Lo peor es que se colocaron delante y no nos dejaban ver el partido. Era el último día de vacaciones, así que a la mañana siguiente comenzaba la rutina escolar. Mi hijo el mayor, apenas bajado del coche, salió corriendo camino de su clase. Ni trauma postvacacional ni narices en vinagre. Corrió todo lo que pudo porque le podían las ganas de contarle a sus compañeros que había estado con Callejón y Granero. Ni los muchos regalos recibidos, ni las noches dormidas en casa de abuelas y primos, ni los amigos que se han quedado en casa, ni la cabalgata, ni visitar el trabajo de su padre, ni patinar en una gigantesca pista de hielo. No, lo más importante de sus vacaciones fueron los coches negros que trajeron a los tres Reyes Blancos. Tal vez estemos haciendo algo mal, no lo sé, lo que ahora sé es que me arrepiento, viendo su ilusión me arrepiendo de no haberle hecho una foto con ellos y que pudiera llevarla a clase, a sus compis. De todo se aprende.

MICROS (HUMOR PROPIO)

9 de enero de 2012

PANICO

Pánico es un juego de mesa bastante entretenido, y creo que muy útil. Para los niños, porque les acerca a la tensión de la respuesta rápida, porque les obliga a pensar y a aprender y manejar conceptos del lenguaje cotidiano. También para personas mayores que están perdiendo la velocidad del pensamiento o como ejercicio lúdico para aprender otros idiomas. Básicamente se trata de enumerar conceptos a la mayor velocidad posible. Sacas una tarjeta que te indica el tema y tú has de decir dos, tres, cuatro palabras, las que te toquen en esa ronda, sobre el concepto propuesto. Hay de todo: cosas que hay en una cocina, palabras que empiecen por A, acciones cotidianas etc. Lo conocimos estas navidades y estuvimos pasando un buen rato con los pequeños hasta que salió una tarjeta que nos dejó a todos helados, sobre todo a mí, que a modo de Fiscal del Estado, impugné inmediatamente la partida y condené a dos años y un día en el fondo del tarjetero a la susodicha asesina de la igualdad. La tarjeta de marras ponía, literalmente: enumerar juegos de niñas ¿Qué clase de diseñador de juegos idea esa tarjeta en pleno siglo XXI?¿Rouco tiene pluriempleo?¿Es un juego de la fundación FAES y no nos dimos cuenta? No logro entenderlo, con lo fácil que es no caer en la ponzoña sexista van y se retratan de una forma tan burda y simplona. Se me atragantó el juego, lo reconozco. Y la respuesta, en el fondo, era fácil, valía cualquier juego. Porque señores diseñadores de juegos de mesa, las niñas pueden jugar ¡¡¡¡ a todo !!! Se me ocurren más preguntas de ese estilo: enumere asesinos en serie, armas de destrucción masiva u objetos para la tortura, tradicionales y actuales. Puestos a cagarla...Métanse una fregona de juguete por donde amargan los pepinos de mi parte, por favor.

MICROS

IRONÍAS CONTEMPORANEAS:
En algún lugar de Occidente un niño llora, desconsolado, la mañana de Reyes porque la wii que le han traído sus majestades es la blanca...
En algún lugar de África una niña llora, emocionada, la mañana de Reyes abrazada a su muñeca, hecha con dos calcetines y una camiseta vieja...

7 de enero de 2012

MÁS ALLÁ DEL ÉXODO

Adelantamiento por la derecha
“Bienvenido al desierto de lo real.”

Morfeo, en Matrix.



Qué habrá de ser mañana del poema.
Qué habrá de no ser o de ser cuando, en la víspera,
ya no es más que una bolsa de plástico amarillo
fundida a la cabeza de un ensueño
con ansias de suicida.
Camina tras sus pasos, en la ciudad cansada,
con el alma en los pies, pisando restos
de mapas sin leyenda, tropezando
con la arena gastada que, mezquinas,
le han legado en herencia las ruinas
del verbo despojado de su aliento.
No puede huir de sí -se va pisando los talones-;
tampoco darse alcance uncido al yugo
de la palabra exánime y sin eco.
No sueña ya el poema, vaga insomne
dentro de un laberinto sin confines
poblado de cadáveres seráficos
ganados por la fe de Mefistófeles
-su hiel huele a penumbras.
La lluvia, contumaz y obscena, cae.
La noche está estrellada y cae la lluvia,
hirsuta y corrosiva, diluyendo
en un charco atestado de salitre
el fatuo titilar del fuego cósmico,
y nace de su coito con las sombras
un lóbrego arco iris que amortaja
el grito en alma viva de una lágrima.
Qué habrá de ser mañana del poeta.
Qué habrá de no ser o de ser cuando, en la víspera,
no encuentra ya un motivo que dé aliento
al légamo suicida del poema.

6 de enero de 2012

CARAMELIX

La tarde de Reyes me ha confirmado algo que ya venía sospechando desde que soy padre y acudo puntual al evento: los hermanos Wachowski pasaban las navidades en España. Esas estancias incluían el paso por alguna de las cabalgatas y ahí encontraron la inspiración para los escorzos de Keanu en su trilogía. Están inspirados en esos abuelos que son capaces de retorcer sus (364 días al año) doloridos y cansados cuerpos en pos de un diminuto caramelo. El culmen, y objeto real de la inspiración, es ese abuelo capaz de coger con la mano derecha un caramelo que se salía de su arco de influencia, anticipándose a un sorprendido niño, mientras con la otra sujeta el paraguas (abierto, para esos caramelos racimo) y estira una de las piernas para permitir el equilibrio necesario...no para sobrevivir, sino para ¡ poder seguir pillando caramelos ! Son los abuelos del "son pa´mis nietos" y su capacidad recolectara no tiene parangón en el mundo animal. Son auténticas cosechadoras humanas del pequeño proyectil azucarado. No me extraña que las ambulatorios estén repletos este lunes de abuelos doloridos y contentos con su botín. Doctor, me duele todo el cuerpo ¿quiere un caramelo? son para mis nietos.

MICROS (HUMOR PROPIO)

5 de enero de 2012

ATEO Y REPUBLICANO

Los que me conocen a medias me dicen que como ateo y republicano mañana debía estar, cabreado y reivindicativo, en el trabajo el primero. Claro, y en Nochebuena y en Semana Santa. Porque soy ateo, pero no tonto. Ya quisiera yo que las fiestas fueran a la carta y celebrar el 14 de abril en lugar del Jueves Santo, pero no me dejan. Además, no lo niego, hay varias razones que hacen de esta noche y del día de Reyes algo muy especial. Los niños, por su puesto. Esa carita cuando se levantan y van corriendo a por sus regalos no tiene precio. Emociona. Y mi princesa. Mañana hará 21 años que besé por primera vez a la mujer de mi vida. Muchos dicen que fue un corte de mangas del destino, un, hala, ahora te jodes, ateo, a celebrar el día de Reyes para toda tu vida. Pues bueno, si es el precio que he de pagar, seré el primero esta noche en ponerle agua a los camellos y galletas a sus majestades, y a celebrar, como se merecen, esas más de dos décadas de besos y abrazos. Me bastará con cerrar los ojos y pensar que los amigos de Oriente este año no vienen sólos, que les acompaña un tal Azaña con un libro bajo el brazo: "Las ases de la III República". Soñar es gratis, de momento...tanto que puesto a fantasear se me ha ocurrido que los Reyes, como paje, podrían traer a Urdangarín y en un momento dado que Don Manuel le estampara la constitución del 31 en la cabeza. Puestos a soñar...

MICROS (HUMOR PROPIO)

4 de enero de 2012

EL RATONCITO Y LOS CHINOS

Ahora entiendo algunas cosas de la economía. Cuando yo era pequeño el Ratoncito Pérez las pasaba canutas. Si el suicidio dental se producía cercano el ocaso del día o tiraba del comodín de las monedas para robarnos el incisivo lácteo, o debías esperar a la noche siguiente con el diente mordiendo la almohada. Ahora, gracias a las tiendas de Chinos, que lo mismo te frien un botón que te cosen un huevo, el Ratoncito, que es mágico pero no tiene ni puta idea de fabricar Gormitis, puede, casi a cualquier hora, cambiar diente por detalle. Eso explica cosas como que en estas tiendas encuentres siempre un rinconcito para los juguetes de entre cinco y diez euros, el presupuesto que suele manejar el Ratoncito de marras. Así no es difícil encontrar un disfraz de Harry Potter versión "más vale que me digas de que vas antes de que meta la pata", junto a los yogures a cinco minutos de caducar. Lo que no explica es la constante rotación. Las grandes empresas deberían aprender de estos comercios. Tienen de mucho poco, pero es que no se suele acabar, si tu te llevas el último tomate Orlando a los cinco minutos puede venir tu vecino a llevarse otra vez el último. Yo creo que hay una red de canales subterráneos y una piara de motoristas chinos reponiendo a diestro y siniestro. Si no, no se explica esa capacidad de rotación. En fin, Ratoncito, que sepas que mi hijo está muy contento con tu detalle y que ya hay otro, igual, igual, en el estante de donde te lo llevaste, seguro.  

MICROS (HUMOR PROPIO)

3 de enero de 2012

POR SU NOMBRE

Si es importante llamar a las cosas por su nombre mucho más lo es llamar a las personas. Lo aprendí en mis largos veranos de vigilante del charco. No era lo mismo decir "eh, niño, no te tires con camiseta" que "Ramón, no te tires con camiseta". El niño no podía escurrir el bulto en el anonimato, sabía que todo el mundo sabía quién era quien hacía qué. Es algo que he intentado transmitir a mis hijos, conocer a alguien y aprenderse su nombre es el primer paso del éxito. Saludar a quien te cruzas con un buenos días María le da la importancia que se merece a la persona saludada. Y sonará pedante o simplón, pero es como si esa persona, la receptora del saludo, se dijera sí, me ha saludado a mí. Nos gusta que nos den la importancia que nos merecemos, y la única forma de ser importante es ocupando un espacio, y diferenciarte de los demás, con tu nombre, es una de las formas de hacerlo. Así que un "buenos días" personalizado, amigo...

MICROS (HUMOR PROPIO)

Nota del autor: este pensamiento del jugador es totalmente figurado y la utilización de la fotografía "oportunista" para reflejar una idea: la indignación ante el racismo no siempre sale de la creencia en la igualdad.

2 de enero de 2012

NUEVO AÑO

Empieza un año y con el final del anterior uno parece que sufre una especie de purificación. Como un impulso. Levantas la cabeza y dices, venga, éste será un gran año. Tal y como están las cosas, la verdad, en la mayoría de las casas las tradicionales uvas fueron acompañadas de un "menos mal que ya termina". Ha sido un año duro, y el que viene tiene pinta de serlo de nuevo. Si hacemos caso al nuevo gobierno sobre todo. El paro nos azota, la tijera se ha desbocado y el futuro es como el que cantaba Molina, muy oscuro, muy oscuro. Pero no es momento de ponerse dramáticos, porque como decía aquel, lo bueno cuando llegas al final del pozo es que sabes que ya no puedes caer más. Así que, vamos a ser optimistas y pensar que hemos tocado fondo, que ahora nos toca sacar fuerzas del salario mínimo y hacer un recorte de mangas a los que mandan (y también a nuestros gobernantes...) y salir de aquí por nuestras narices. Iba a decir cojones, pero sería faltarle al respeto a la mitad del salto. Y podremos. Y lo haremos ¿Sabéis por qué? porque sigo pensando que, pese a Ztpés, Rajois, Botellas y demás elementos, éste sigue siendo un gran país, habitado por grandes personas, con ingenio, con alegría, con ganas, así que, lo dicho: vamos a tirar p´lante ¿o no? Si pudimos ganar un Mundial, una crisis para nosotros es pan comido.

MICROS (HUMOR PROPIO)