31 de agosto de 2022

 PIONERA OBREGÓN: 


Se habla poco de su preconización, Ana, Anita Obregón. Los que tenéis una edad entenderéis lo que os cuento. Ella, sin saberlo, inventó la filosofía Instragramer. No era tan insta, porque tenía que quedar con los fotógrafos, fingir estar allí por casualidad y fingir el robo de un posado, después se editaba, se imprimía y llegaba a los kioskos. Pero la idea era la misma: fingir, postureo, lugar idílico, mira como molo etc, etc. Ahora, democratizado hasta el paroxismo, nos olvidamos de ella. Valga esto de homenaje a toda una pionera olvidada del postureo. 

24 de agosto de 2022

 

SOLEDAD DE MEDIO ÁRBOL:

Como un árbol separado en dos troncos, pero con las ramas entrelazadas al cielo. Así fue toda su vida, desde que hiciera más de setenta años la tomara de la mano en la ribera del arroyo que daba nombre al pequeño pueblo manchego. Una posguerra, una huida a la ciudad, unos hijos, un futuro a trompicones; pero siempre, siempre, hacia delante, y de la mano, como regresaron del río aquella tarde. Jamás se planteó que pudiera haber una existencia sin ella, ni una noche y una cama solitaria. La muerte del amor de su vida rompió su terco y viejo corazón, partiéndolo en pedazos, pero, cruel compañero, se empeñó en seguir latiendo. Ojalá el tronco partiéndose hubiera arrastrado al resto del árbol. En los últimos meses su mujer estaba especialmente triste, incluso angustiada, mientras él trataba cuidarla con su creciente torpeza. Quien cuida a quien, se preguntaba su hija en cada visita. Le preocupaba en extremo dejarlo solo. Morir no tanto, ley de vida. Siempre fue una mujer fuerte. Pero él ¿qué haría sin ella? Si no era capaz de encontrar los macarrones. Desde que se fue, a él le pesa la angustia y jamás volvió a buscar pasta en la despensa. Desconocía esa cualidad de algunas sensaciones. Como una losa, como lava agarrada a la garganta; y un vacío sin fin, allá donde mirase. De poco servían las visitas de sus hijos, o de sus nietos, cada vez más espaciadas…otra ley de vida. O el cariño de su cuidadora de extraño acento sureño. El tiempo solo era un trituradora. Recordarla, peor que tratar de olvidarla. Y cada noche, sin remedio, buscando en el cobijo del sueño la paz que no encontraba con los ojos abiertos, susurraba a un dios, en el que no creía, que por favor fuera la última. Pero llegaba el alba, y la luz, y los ojos abiertos. Y gritaba ¡Cómo voy a creer en ti! a ese dios inmisericorde al que nunca le había rezado. Todas las noches el mismo ritual, la misma súplica. Hasta que una mañana lo consiguió. Lástima que nadie pudiera despertarlo para contarle que sonreía cuando Dulceida lo encontró en la cama, al levantar el día.

20 de agosto de 2022

 LOS QUE VIENEN:

No sé si clasificarlo como chascarrillo, o como rutina, o como sistema de defensa en contra de la madurez. Pero es un rol asumido, generación tras generación, los que vienen por debajo no tienen ni idea. A esta generación les ha caído, como imagino en los sesenta y setenta con el movimiento hippie, el sambenito de la indolencia. Los nini, ya sabéis, ni trabajo ni estudio, son el paradigma. Tal es así que uno se hace a la idea de que son la mayoría. Es el síndrome del taxista capullo o del chorongo de perro. La gran mayoría de los taxistas son buena gente y la gran mayoría de dueños caninos recogemos los excrementos, pero unos pocos hacen tanto daño que invierten las percepciones. Porque si no tomé mal el dato solo un tres por ciento de los jóvenes ni estudia ni trabaja y, por contra, estamos en el mayor porcentaje de la historia de estudiantes universitarios que al mismo tiempo tienen que trabajar. Aunque soy de letras me encantan las matemáticas, sobre todo cuando me dan la razón y es que los números, se pongan los agoreros como se pongan, son como el algodón (perdón por el parangón exclusivo para nostálgicos) no engañan. Nuestros jóvenes vienen con fuerza, como lo hicimos nosotros, y antes nuestros padres, pero lo que no tengo tan claro es si nosotros seremos capaces de dejarles un mundo mejor que el que nos dejaron nuestros padres. Eso me preocupa más.  

18 de agosto de 2022

 HOY LOS GRADOS, AYER LOS HUMOS...

Estoy teniendo como un deja vu. Sé que no me voy a granjear amigos nuevos con esto, pero ¿no os pasa que cuando veis a los agoreros (de siempre) anunciando la ruina del comercio, así, en general, con el tema de la temperatura no os acordáis de la ruina que iba a suponer la ley anti- tabaco? Se nos decía que el españolito de barra sería incapaz de entrar en un bar si no le dejaban fumar. Y ahí están los bares, con el aire limpio y los parroquianos de siempre. Pues lo mismo va a pasar, qué digo, ya está pasando, con la temperatura y la pérdida de la luz de los escaparates con el establecimiento cerrado. Hago memoria, os lo juro, y trato de recordar la última vez que hubiera podido realizar una compra llamado por el canto de sirena de un escaparate iluminado en la noche y no lo recuerdo. El caso es que estos días de aplicación de la norma, las tiendas venden lo mismo, los bares sirven lo mismo, los menús en los restaurantes no se han visto afectados...Ha pasado con todas y cada una de las iniciativas en este sentido que cualquier gobierno progresista se haya empecinado en poner en práctica. De hecho nos podemos remontar a la noche de los tiempos, cuando los agoreros anunciaban la ruina del comercio por el fin de la esclavitud. Y después, cuando se reguló la jornada laboral. Y más tarde con las vacaciones pagadas, con el paro, con...En fin, en un par de años entraremos en una cine en verano y diremos ¿os acordáis de cuando teníamos que venir con manga larga por el aire? igual que ahora recordamos comer con un señor y su puro en la mesa de al dado. Y nostalgia ninguna, al tiempo. 

17 de agosto de 2022

 DOS AMIGOS:

Podría ser la historia de cualquier par de compañeros de patio, de entreno de fútbol. Podría. Digamos que uno se llama Ivan y otro Joan. Tienen la misma edad y se conocen desde hace tiempo. Un día, en el entrenamiento, Ivan se acercó a Joan y le pidió perdón. Joan lo abrazó y le dijo que no tenía por qué pedirle perdón, que él no tenía la culpa de lo que hubiera hecho su hermano, y que no dejaría de ser su amigo, ni de entrenar tres días a la semana a su lado. Incluso con estos detalles podría ser una historia más de patio de colegio, o de plaza de barrio, o de calle de pueblo. Y en cierto modo es así. Lo peculiar es que nuestro Joan salvó la vida en Las Ramblas de milagro; bueno, de milagro y porque su madre tuvo la fortaleza, la entereza y el instinto de tirar con todas sus fuerzas de su camiseta mientras la furgoneta rugía a toda velocidad por la calle. E Ivan, muy a su pesar, es hermano de uno de los responsables del atentado. Ahora Joan quiere ser policía e Ivan será, probablemente, buena persona toda su vida. 


Esto no es un cuento. Es la vida real. 

5 de agosto de 2022

 TEMPERATURAS:

Hay cosas que no entiendo. Si me conoces un poco, tu repuesta, pelín socarrona, bien podría ser ¿pero entiendes algo?

El caso es que se ha montado un revuelo, Ayuso mediante, con la ley de los termostatos. Como siempre que se toma una iniciativa gubernamental, la oposición ejerce de y se opone, con más o menos vehemencia, con más o menos criterio. No tengo elementos para cuestionar ni lo uno ni lo otro, pero como siempre, un par de preguntas. Un climatizador ¿no funciona inyectando aire frío o caliente en función de la temperatura que se le ha pedido que se alcance y mantenga? Lo digo porque lo que escucho entre los usuarios condenados a cumplir esta ley (lo siento, Ayusistas, es lo que tiene la ley) es que con esa temperatura, por ejemplo, en una cocina los cocineros se van a tostar y el género estropear. O que si hay mucha gente o poca gente no es lo mismo. Y no lo entiendo. Porque si tu le dices al termostato que ponga 28 grados, pues hasta que no tenga esos 28 grados no parará de inyectar aire frío. Y si hay gente moviéndose, o calor adicional, pues no llegará a esa temperatura nunca y siempre estará inyectando frío. De ahí lo de la puerta abierta, como entra el calor, la máquina siempre estará trabajando y por ende consumiendo. La otra pregunta viene de una costumbre bastante común, me incluyo, que nos invita a poner el termostato en verano a 22 grados, por ejemplo, pero en invierno a más de 25 ¿no deberíamos tener como objetivo, invierno o verano, la misma temperatura en nuestro espacio vital?¿por qué buscamos unos 22 grados en verano que nos harían llevar chaquetilla en casa en invierno? Que yo sé que jode que el gobierno nos imponga, pero es que ponemos muy poquito de nuestra parte. 

4 de agosto de 2022

 MI NO ENTENDER: 

Unos policías, municipales, por si este apellido sirviera de algo, violan a una menor y no van a la cárcel por un acuerdo con la víctima, a cambio de un curso de educación sexual y el compromiso de no volver a violar. Ole tus cojones. Es que no se me ocurre otro epílogo para este prólogo. Ya me imagino a un asesino en serie salvándose de la cárcel a cambio de un curso de educación cívica, porque para el acuerdo con los muertos llegaría tarde, y el compromiso de no volver a destripar a nadie. Lo del acuerdo, perdonadme la cojera, es lo que más me escama. ¿La fiscalía no está obligada a velar porque los delitos tengan su pena, amén de acuerdos extrajudiciales?¿No es esto ponerle una venda, con el símbolo del dólar, a la justicia y hacer que poderoso caballero siga siendo Don Dinero? ¿Qué tipo de futuro le esperaba a una muchacha que prefiere acordar que sus violadores se vayan de rositas?¿Y a sus padres? Pensad en ello, los padres prefieren ver a los violadores en la calle que el peregrinaje judicial para su hija ¿Cómo nos comportamos como sociedad, criminalizando a la víctima, obligándola a un eterno calvario judicial y mediático, para que ese camino sea peor que el cumplimiento de la ley? Su vida ya está hecha una mierda, sin culpa, sin participación, sin iniciativa, pero el ejercicio de la justicia la hunde más en la mierda. Tenemos que hacérnoslo mirar ¿no os parece?

3 de agosto de 2022

 LA PAELLA Y EL COLORANTE: 

Hay una guerra civil entre los que ven que todo lo cocinado en una paellera (ay madre...) es paella y aquellos que consideran paella a la "paella" y al resto arroz con cosas. La clave, pues, está en las comillas. Un cocinero, con el que me pasa lo mismo que a Cervantes con el rincón manchego, de cuyo nombre no consigo acordarme, dio una clave que me recordó mis (forzosos) tiempos de estudiante de arqueología. El síndrome de la coca-cola. No sé si tenéis ese dato, pero la historia se estratifica como hacen los adolescentes con su ropa, la del lunes abajo, la del martes arriba, más arriba la del miércoles...solo que con miles de años. El arqueólogo va de lo más reciente a lo más antiguo, con paciencia, su brochita y su buen hacer. Estrato tras estrato. Si en el décimo, por decir algo, de golpe, aparece una lata de coca-cola, todo lo anteriormente datado pierde vigencia...Pues algo así dijo el cocinero para zanjar la discusión. ¿Qué era y qué no era una paella? Pues él dijo que desconfiaba de cualquier receta clásica que incluyera como ingrediente fundamental el colorante. Ahí tenéis la lata de coca-cola. Amén 

2 de agosto de 2022

 MACHISMO, SUMISIÓN, PINCHAZOS:

No consigo entenderlo. Ya sé que con mi historial deductivo eso no da muchas pistas sobre la dificultad de lo incongruente. El caso es que ahora se ha puesto de moda lo de pinchar a las chicas en los garitos. Era un miedo que andaba rondando por ahí. No soy padre de niñas, pero las tengo en mi entorno, y creedme, hay un runrun molesto sobre el tema. La idea, parece ser, es logar inocular a la pobre muchacha una droga que la convierta en una sumisa a la que se puede humillar, violar, etc, etc. Pues resulta que ocho o diez casos que he escuchado en los últimos días son pinchazos que no vienen acompañados de esa sumisión. Solo una especie de entumecimiento, un atontamiento y en ningún caso, menos mal, ha derivado en una situación violenta (más) porque la chica ha podido pedir ayuda. Entonces ¿hay mucho hijo de puta que además es muy torpe?, ¿droga caducada? ¿o es que se ha puesto de moda eso de generar el miedo entre la chiquillería femenina sin más? No sé cual de las opciones me da más miedo. Si se trata de un macabro juego, no le veo la puta gracia, hacer que nuestras hijas salgan de fiesta muertas de miedo, justo en esos momentos que son los mejores de su vida, los del descubrimiento de la libertad desde su propio yo en relación con el resto del mundo; una relación que solo ellas pueden determinar a qué nivel ha de llegar. Si es una especie de campaña quijotesca para concienciar a la chiquillería del peligro, amigo Sancho, dile a tu Quijote que vuelva al "Fornite" y deje de tocarnos nuestras santas posaderas. El caso es que, real o no, este peligro, otro más, no hace sino debilitar a las mismas de siempre. Es un poco frustrante. Por mucho que la mayoría nos empeñemos en remar, parece que la minoría tiene muy fácil alejarnos la orilla un poquito más, un poquito más...  

1 de agosto de 2022

 LOS BANCOS: 

Hace años, creo que unos diez, se inyectó al sector bancario, para evitar su ruina, unos 58 mil millones de euros. Parece ser que se han recuperado en torno a los 6 mil. Esto es, que nos deben a todos los españoles más de 50 mil millones. 

Los beneficios de los 5 bancos más grandes en España, en lo que llevamos de año, ascienden a unos 10 mil millones de euros. Es importante aclarar que se trata de beneficio no de facturación; es decir, que ingresan 10 mil millones más de los que gastan. Eso, en medio año...

El gobierno (comunista, ya sabéis...), en forma de nuevo impuesto, les ha pedido un empujoncito a la Hacienda pública (que deberíamos ser todos...) por un par de años. Los bancos han dicho que eso es inviable, que supondría la ruina del sistema bancario, y no sólo eso, sino que amenazan con la posibilidad de no conceder créditos al españolito medio. 

Tengo una pregunta ¿soy yo el único que piensa que estos tipos encorbatados nos están tomando el pelo o tú también lo piensas?