PORNO PARA MUJERES

No hablo prácticamete nada de sexo en el blog. Y eso, las personas que me conocen y sobre todo las que han leído mis novelas, dicen que es muy extraño. Y tienen razón. El sexo es una idea recurrente en mi universo literario, creo que en el encuentro entre dos cuerpos apasionado hay más belleza que en ningún otro lugar del universo. Pero el caso es que, sin tener una razón real, no he hablado de ello en el blog. Sí que es verdad que he valorado la posibilidad de hacer una sección especial dedicada al tema, pero una sección abierta. Lo hice cuando las visitas invitaban a pensar que tendría respuesta. Ahora no creo que esas puertas abiertas fueran cruzadas por demasiados colaboradores. El caso es que ha llegado hasta mí una dirección de internet de un grupo que tiene un proyecto que considero interesante: un cine "X" hecho por mujeres y para mujeres, homo y hetero. Esta es la dirección de la página: http://www.mycookingfilms.com/.
¿Qué es lo que pasa con el cine porno tradicional?. No voy a ser reaccionario en este tema, porque creo que es un cine adulto hecho por adultos. Es cierto que hay un mito oscuro sobre él del que será muy difícil que se desembarace, pero como posible espectador, valoro la calidad y lo que me ofrece. En general las películas, entendidas como una expresión más del cine, son malas. Pero estoy seguro de que aquellas que buscan la calidad, el argumento, serán arrinconadas en el mercado. Es este un mundo de consumo rápido y de mando a distancia. Cada uno busca lo que quiere encontrar y el resto de la película verdaderamente le da igual. Además, si ponemos buenos guionistas, buena producción, buena postproducción, se encarecería el producto. Aun así, ¿qué fue antes?, ¿el huevo o la gallina?. Tal vez si los productores se dieran cuenta de que la sensualidad y el sexo bien contado tiene una cuota de pantalla, se lanzarían a hacer productos de calidad que rompieran tópicos. Puede que luego fuera un fracaso, pero al menos nos hubieran regalado una veintena de buenas películas.
No quería zanjar el tema sin el que considero es el verdadero peligro de este cine: el consumo adolescente. Tampoco quiero ser alarmista, porque también fui adolescente e intenté consumir porno (en mi generación era muchísimo más complicado). El caso es que si la referencia que tiene un adolescente sobre el sexo es la que recibe del cine porno va a sufrir verdaderos traumas una vez que se enfrente al cuerpo a cuerpo en la vida real. Sin ir más lejos, se desnudará frente a una mujer y se sentirá frustrado porque ella no se arrodillará a chupársela hambrienta y con rostro de fascinación del tipo "nunca había visto algo así" o al menos "mira que lo estaba esperando". Las películas son machistas (cuando no misóginas directamente) y lo son fundamentalmente porque el placer femenino, dado que carece de demostración fisiológica (eyaculación) pasa totalmente a segundo plano y las interpretaciónes de las mujeres son tan forzadas que esos adolescentes, cuando tengan los gemidos sordos de sus primeras amantes en su cuello, se sentirán decepcionados. Pero tampoco podemos censurar este cine simplemente por eso. En realidad, el cine porno no es más que la versión erótica del cine fantástico y lo que ahí ocurre uno tiene que ser consciente de que no es real, que es pura mecánica y fantasía. Y de todo se puede aprender, siempre, así que, tal vez no volemos como Rocco, pero sí que podemos echarnos unas risas e intentar divertirnos.
A todo esto, esperamos pacientemente la irrupción de la visión femenina en el cine pornográfico, esperando que ese aire fresco renueve ese cine para sacarlo de la marginalidad y el consumo semiclandestino.