28 de noviembre de 2007

LA RELATIVIDAD DEL TIEMPO

Y yo pensando que la filosofía no tenía reflejo en la realidad, que estaba todo en la cabecita de los pensantes. Pero, ¡ qué va !. El tiempo es relativo. Y tanto, diez minutos son una hora. Al menos en mi ciudad. Hoy he tenido la mala suerte de no haber conectado el despertador. Me ha arrebatado de morfeo la ducha del vecino y mi rutina, diez minutos apenas después de la hora prevista. Así que he salido de casa tan solo diez minutos más tarde, pero con la mosca detrás de la oreja;, porque uno no madruga mucho por capricho. Y ahí está, la filosofía poniéndose a los pies del ciudadano, en este caso al asfalto del caucho del coche de los ciudadanos. El trayecto que hago desde mi casa a mi trabajo me lleva diariamente 25 minutos. Hoy ha sido algo más de una hora, por lo que técnicamente esos diez minutos han sido cincuenta en mi vida. Ya lo decía el filosofo, el tiempo es relativo. Así es mi ciudad, todos los despertadores están conectados al mismo tiempo. Entonces, cabe preguntarse, los que tarden más en ponerse en marcha saldrán más tarde que el resto. No, no, ahí el sino juega su baza, los que más tardan se levantan en realidad antes, así que todo el mundo se pone en marcha al mismo tiempo, diez minutos después de que salga de mi casa todos los días. Siento una presión tremenda, es como esa escena de Indiana Jones en la que va corriendo por un túnel y le persigue una enorme bola. ¡ Qué tensión ! si me despisto un segundo me veré inmerso en el traficazo, tengo esos diez minutos de cortesía para hacer el trayecto sin paradas, sin poder leer el periódico (algo bueno tiene el atasco) y si fallo, estaré condenado a una hora de retenciones. Así es mi Madrid, divertida, siempre atenta para que el ciudadano tenga algo entretenido que lo mantenga despierto. Que gran ciudad...

3 comentarios:

ralero dijo...

Me solidarizo, por razones obvias, contigo, yo hoy he tenido suerte y sólo ha sido hora y media, a pesar de haber salido un poco más tarde. Pero ¿de qué nos quejamos? ¿no es esto el progreso, la calidad de vida, el estado del bienestar? En fin, creo que en Somalia están mucho peor, y como mal de muchos consuelo de tontos... pues eso, que vivimos sumidos en la "civilización" de la estulticia y los ojos tapados (a los problemas de los otros y a los propios). Ahora, otra vez, de nuevo..., será por aquello de la campaña electoral, sale de nuevo el tema del cambio climático y que si premiar a las familias ahorradoras de energía, que si patatín, que si patatán, una mezcla de mentiras y bobadas que dan náuseas. Para enfrentarse realmente a este problema no caben otras medidas que cambiar radicalmente el modelo de ciudades y de transporte, pasando por una menor especialización de la economía por zonas. Todo eso lo saben los políticos, que para eso tienen asesores cojonudos, pero, amigo, con la Iglesia -quiero decir con la economía- hemos topado.

Abrazos.

ralero dijo...

¡Coño! ¿Cómo has tenido el valor de enfrentarte a esa "fiera" del vídeo? Tú derrota estaba cantada.

Abrazos (para el campeón, por supuesto, que ya sabes por los perdedores se pierde pronto el afecto, jajajajaja).

Larrey dijo...

Pues sí, sí que es una fiera, que tiene muy mal perder el tío, no sé de dónde lo habrá sacado...