7 de marzo de 2007

LA MUJER TRABAJADORA


Hoy es el día de la mujer trabajadora. Es un concepto confuso, que al final no deja contento a nadie. ¿Por qué trabajadora? se dijo primero. ¿Por qué no hay día del hombre trabajador?. Ahora está extendida la idea de que es el día de la mujer, sin más, porque todas las mujeres, en el fondo, trabajan. ¿Los hombres no?, ¿no tienen derecho a su día?. Evidentemente esto es demagogia. Es lo que ocurre con las respuestas discriminatorias positivas, que cuando desaparece el elemento discriminador del argumento (en este caso la situación laboral de la mujer frente al hombre) éste pierde todo el sentido.

Es buen día, me digo, para ver mi entorno dentro de este debate, de este prisma. Mi pareja tiene un trabajo estable, bien remunerado y es muy respetada dentro de su profesión, donde hay una mayoría aplastante de mujeres. Tengo más compañeras que compañeros en mi oficina. Incluso tantos jefes como jefas. No sé lo que ganan ni unos ni otros, pero vienen a trabajar y se les respeta por su desempeño y por su forma de ser, no por sus pantalones o sus faldas. Se sigue hablando de discriminación, pero pregunto en mi entorno y no conozco a ninguna mujer que tuviera problemas por serlo a la hora de acceder a un puesto laboral. Esto no quiere decir, ni mucho menos, que el problema no exista, pero no sé si las cifras (lo que ganan de más los hombres frente a las mujeres, por ejemplo) sirven para ilustrar una situación que ofrece demasiados matices. Cuando una mujer es rechazada en el trabajo siempre puede argumentar que lo han hecho por ser mujer, o que gana menos dinero por serlo, o que nunca accederá a puestos de responsabilidad por la misma razón. En cambio un hombre nunca podrá hacerlo y seguro que existen los mismos casos en uno y otro bando. Eso me congratula, porque no creo que estas reflexiones se pudieran haber hecho hace décadas, pero también me invitan a pensar que hay que terminar con el victimismo. Evidentemente hablo tan solo del trabajo, de la discriminación laboral, la violencia de género es otro cuento (de terror).

Puede que lo que diga no sea políticamente correcto, que mujeres que se hayan sentido discriminadas lean esto y tengan ganas de abofetearme, pero tengo la certeza de que hemos avanzado mucho. Y lo que queda, no es tanto un trabajo en una sola dirección, sino en dos. No hay que acabar con el machismo en el mundo del trabajo, sino con el sexismo. Pese a todo, el libre mercado es así, si una empresa decide contratar solo mujeres, o solo hombres, es su problema, y lo será en más de un sentido porque la lógica indica que la paridad es lo más práctico y eficaz siempre.
De todos modos, en este día siempre guardo un guiño especial para la mujer que es emprendedora (como mis tres princesas de Momo) y para las madres, trabajadoras o no, que siempre dieron más de lo que pudieron porque sus hijos, nosotros, pudieramos gozar de todas las oportunidades que ellas no tuvieron. Por eso echo de menos un día del hombre trabajador, porque creo que los padres, los hombres, también han hecho mucho por nosotros.

Pese a todo lo que he contado, creo que hoy es un día especial, no tanto por reclamar lo evidente, sino por recordar a tantas mujeres que dieron su descanso y hasta su vida para que ahora podamos pensar que las cosas no están tan mal. Va para ellas mi aplauso.


4 comentarios:

Dudu dijo...

Quizás el siguiente paso en la evolución hacia la igualdad de género sea acabar con la discriminación positiva. Pasos en ese sentido se van dando. Por ejemplo cada vez hay más hombres que se toman el permiso de maternidad y cada vez suena menos raro en el entorno laboral. En los centros comerciales cada vez veo más aseos de hombres con cambiador de bebés.

Anónimo dijo...

Que sí, que la mujer a trabajar pero en casa ¡coño! Los hombres ya traeremos el dinero pero ellas a cuidar de nuestros hijos y a tenernos la comida caliente para cuando llegamos a casa. Señora en el salón y puta en la cama. Que con la modernidad se han perdido las buenas costumbres.
firmado:
Dark Dudu Vader
desde el lado oscuro

Caminante dijo...

Gracias por la dedicatoria. Besos PAQUITA

Larrey dijo...

se le ha visto el plumero, demasiado forzado...