23 de julio de 2007

MICROS

Terminó la novela. Le había contado una historia sublime y estaba hundido, porque también le había demostrado porque él jamás llegaría a ser un gran escritor.

2 comentarios:

ralero dijo...

Nunca se sabe. Es cuestión de seguir escribiendo, pero sobre todo leyendo... y nunca se sabe.

Un abrazo.

Larrey dijo...

me da que el protagonista de mi historia sí que lo sabía, lo tenía muy claro ya, después de una veintena de años de egocentrimo creativo le llegó la vaca flaca de la humildad resignada.