CINE

Abre los ojos. No es momento para dudas. Mira mi carne trémula, amanece que no es poco y tú y yo tenemos una asignatura pendiente. Átame si quieres, pero seguiré buscando la buena estrella en este barrio o en el otro barrio, porque mi querida señorita esto es más que amor frenesí, es el silencio roto, sin vergüenza, los secretos del corazón remando al viento y sin noticias de Dios, a solas. Estos no son los peores años de nuestra vida, los olvidados, no es nuestra ópera prima, es nuestra obra maestra, porque has de saber que nadie hablará de nosotros cuando hayamos muerto. No olvides, hay días contados, y estas divinas palabras te esperarán siempre. Sé lo que dicen, que el amor perjudica seriamente la salud, pero siempre he pensado que hay besos para todos, un boca a boca sideral, cuando vuelvas a mi lado y pasemos del rosa al amarillo y nuestros demonios del jardín se cansen de sus celos y vuelva a parecer el bosque animado, tal vez entonces verás que esto no es el sueño del mono loco, que de verdad te espero al otro lado de la cama, en el sur, entre tinieblas, terminado el viaje a ninguna parte, el extraño viaje, fugado del laberinto de pasiones, zanjada la caza en la colmena de mis sentimientos sabré darte la flor de mi secreto. Es la hora de los valientes, de olvidarnos de los otros, de preguntarse ¿qué he hecho yo para merecer esto?. Mírate, ¿qué hace una chica como tú en un lugar como este?, triste. ¡ Ten tu arrebato !, tras el cristal, más allá del asfalto, está tu antártida. Allí seremos los amantes del círculo polar. No lo dudes, tienes un lugar en el mundo, en el mío, y allí te espero en el kilómetro cero, donde como furtivos, yo seré tu Don Juan en los infiernos y tú mi Juana la loca. Tengo una tesis, si buscas tu tierra y libertad, si te olvidas de los tacones lejanos, si te dejas llevar por las alas de mariposa, si saltas sin pensar en el airbag, llegará tu belle epoque y descubrirás que hay flores de otro mundo. Sube la calle mayor de tus temores, olvida el ángel exterminador del pasado, verás el cielo abierto, cesará el desencanto. Clausueremos el día de la bestia y verás, casi despistadamente, el pájaro de la felicidad posarse en tus suspiros. La primera noche de mi vida alguien lo dijo, es la niña de tus ojos, hable con ella, ¿te acuerdas? fue la historia de un beso, porque mi niña, you are the one, eres mi jamón, jamón y a tu lado poco importaría que fuéramos todos a la cárcel, porque sé que de un beso tuyo nace un volver a empezar. Por eso, pase lo que pase, estaré siempre en tu lista de espera, plácido, sin prisas, como el abuelo que espera ver el sol del membrillo. Siempre estaré, porque estoy para estarlo, mi niña...Hola, ¿estás sola?