15 de enero de 2009

PUBLICIDAD ATEA

Soy ateo. Casi militante, como lo son la mayoría de los católicos que conozco, poniendo ciertas partes de su vida en función de sus creencias. Jamás discutiría con nadie sobre la existencia de Dios y no por la manida incapacidad para demostrar su inexistencia (que se nutre de la misma incapacidad para demostrar lo contrario) sino por pereza, respeto y lógica. Creo que la fe (y la ausencia de) es una cuestión totalmente privada. Si defiendo que las religiones no deberían salir jamás del ámbito privado ¿cómo voy a hacer campaña en favor del ateísmo? sería una incongruencia. Con esta premisa vaya mi respeto a que el grupo de librepensadores haya decidido gastar (o malgastar, según se mire) su tiempo y dinero en poner en los autobuses una frase (encima dubitativa, lo que me faltaba, que innecesaria corrección política) invitando a pensar que Dios no existe. Que hagan lo que quieran. Ridículo me parece que se haya cuestionado su legalidad. Es como si un multimillonario decidiera poner en las marquesinas "soy del Atleti" y hubiera que reunir a una comisión para determinar su legalidad. No ofende, ni lo uno ni lo otro. Lo hace, claro, a las mentes rancias de la derechona española y a los ultras católicos que subidos en la paranoica ola de sólo yo sé la verdad, se creen en el derecho de ser los únicos en manifestar sus opiniones y creencias. Han sido tan simples e infantiles que como defensa, una vez que la legalidad se ha impuesto, han recurrido algunos (algunos, reitero, algunos) a una contracampaña en el mismo sentido. Amigos, este y tú más no hace sino alimentar la bestia (es una metáfora) que intentar aniquilar. En publicidad la polémica es un plus.
Para mí todo es mucho más sencillo. Los espacios públicos tienen su regulación y a ella han de atenerse, moralidades y creencias a parte. Eso implicaría, por ejemplo, que toda manifestación religiosa tuviera que tomarse como se toman el resto de las manifestaciones, es decir, la de un grupo que sale a la calle a expresar un opinión sobre un aspecto concreto de la realidad. Así, por ejemplo, las procesiones de Semana Santa debería seguir el mismo protocolo de seguiridad y administrativo que la de amigos de la bicicleta. Pero eso sería un sacrilegio, ¿no? amigos del Dios existe...

5 comentarios:

Dudu dijo...

Dios existe... o no...
qué Dios existe...o no...
Creo que desde la mezquita de la m-30 todos los días sale otro autobús que dice:"todos están equivocados, Ala es el verdadero Dios"

Elena dijo...

CARRIL BICI YA EN MADRID!!!...que yo me manifesté en familia y lo disfruté mucho mucho...

Anónimo dijo...

Uuuuuuy!!! casi casi de acuerdo al 100%
Tres apuntes solamente:
Larrey dice: "No ofende, ni lo uno ni lo otro. Lo hace, claro, a las mentes rancias de la derechona española y a los ultras católicos que subidos en la paranoica ola de sólo yo sé la verdad, se creen en el derecho de ser los únicos en manifestar sus opiniones y creencias. Han sido tan simples e infantiles que como defensa, una vez que la legalidad se ha impuesto, han recurrido algunos (algunos, reitero, algunos) a una contracampaña en el mismo sentido".
???????????????????Coño que yo sepa los unicos que han publicitado algo de que dios existe en los buses es la Iglesia Evangelica de Fuenlabrada. ¿de la derechona? no se no se,
Ay como tira la cabra al monte.
Larrey dice: "que toda manifestación religiosa tuviera que tomarse como se toman el resto de las manifestaciones, es decir, la de un grupo que sale a la calle a expresar un opinión sobre un aspecto concreto de la realidad". Como me alegro que con el paso del tiempo (17 dias) desde el post de La Familia, veas sus manifestaciones así, sin la ceguera que produce todo lo anti-.
Por ultimo respecto a las procesiones, pues pienso que es la tradicion cultural que nos ha tocado, como los toros. pero vamos dile tu a un cofrade de sevilla que limitas de alguna manera la procesion de su santo, si si a uno de esos que vota a izquierdas desde antes de nacer nosotros.
salu2.

Larrey dijo...

Solo una puntualización: El corral, siempre lo he visto igual, ahora, cuando salgan a la calle hacen público su mensaje y me dan derecho a mi a valorarlo y que salgan a la calle para decirme lo que tengo que hacer (sería como si los ateos dijeran por creer en Dios eres un idiota y te pierdes la vida de verdad, la que vivimos nosotros) no me ha gustado, ni me gusta (pasados los 17 días) ni me gustará jamás. Pero si recuerdas aquel post ponía lo mismo que ahora, me parece bien que salgan a la calle...

Jésvel dijo...

Bueno, mi opinión ya la publiqué en mi blog (http://jesveldigital.blogspot.com/2009/01/no-tomars-el-nombre-de-dios-en-vano.html).

Espero que la polémica sirva para que se promocione el transporte público...

Respecto a las manifestaciones públicas de fe, de antife o de cualquier otra convicción, me da la sensación de que nadie se lo toma en serio... ¡qué le vamos a hacer!