7 de noviembre de 2008

LAS RUBIAS Y LOS DOSCIENTOS CV


Es una escena que se repite a lo largo del mes no pocas veces. Voy con mi bravito por la carretera (M40, para ser más exactos) justo al límite que marca la velocidad. A mi izquierda acelera un coche potente, con cierto aire deportivo, probablemente un BMW, se va acercando hasta que me adelanta. Cuando lo hace me fijo, si es mujer el perfil es, en un 99,9% el mismo: mujer de mediana edad, grandes gafas de sol que lo parecen y no lo son y ¡ pelo rubio !. Me pregunto si Llongueras ha logrado meter mano en el mundo de la automoción o es que a las morenas ¿no les gustan los coches potentes?. Ya me lo estoy viendo, tome señorita, su BMW 320 de color negro con todo el equipo incluyendo, por su puesto, este tinte de pelo rubio para que no desentone con la tapicería blanca ese moreno tan vulgar que nos luce, señorita, que va a llevar usted un coche de gran cilindrada. No se trata de un estudio científico pero si de una percepción con tintes (rubios, por supuesto) de certeza. No hay conductora con gusto por los cilindros grandes (madre, no sé como ha sonado eso, ahí lo dejo) que no sea rubia. Es un misterio como lo era que para ser novia o esposa de un futbolista en los ochenta tenías que ser también rubia, ¿serían los de BMW, para ahorrarse los tintes?. En fin, como digo siempre, ver para creer, y acelera, rubia, acelera.

1 comentario:

Dudu dijo...

Bueno... a muchos nos gustan los CILINDROS GRANDES.... y no somos mujeres...