26 de febrero de 2008

¿DEBATE?

Ayer yo no quería verlo, pero como hace mucho que no soy uno (ni dos) pues ya que me tocaba hacerlo decidí tomar algunas notas para plasmarlas aquí, siendo estas, por tanto, mi visión subjetiva de lo ocurrido ayer.
Partamos de una base, todo mi apoyo a la academia y bla, bla, bla, pero la puesta en escena fue triste y la realización, tan encorsetada en los límites impuestos (ese consuelo me queda) austera y anticuada. De otra época.
En cuanto a lo dicho, daremos cuenta de las notas por orden. Abrió el pastel Rajoy (en el futuro R) algo nervioso, con argumentos infantiles y demasiado memorizados. Pareciera una versión robótica de sí mismo. Zapatero (Z en lo sucesivo) estuvo en esa primero intervención más ameno, ágil, con ideas muy claras, enarbolando datos desde el primer segundo y también lanzando la primera crítica a la oposición, lo cual fue un aviso. R en el turno de la economía seguía leyendo, algo impropio de un orador de su experiencia, pero manejó muy bien los datos, incluso danto la vuelta a aquellos que no pudieran serle del todo favorables, con ideas novedosas (parados al día) y también una acusación indemostrable (la primera de la noche) la teoría de la inercia para justificar la bonanza de los primeros años de Z en el gobierno. Z, por su parte, quiso sacar tajada del debate de Solbes, lo cual no es del todo apropiado, y también esgrimió datos, pero de forma mucho más breve, escudándose en la crisis mundial para explicar la española (tan indemostrable como la inercia de R). De esta parte no me gustó que hablara del superávit de las arcas del estado como un logro. No, señor Z, lo que tiene que hacer el estado es gastarlo todo, hasta el último euro, y hacerlo de forma justa. Tampoco me gustó que en este tercio incluyera alguna referencia a ETA. R, por otro, manejando las cifras estuvo certero, pero torpe con los gráficos, al realizador no le daba tiempo a mostrarlos, porque lo hacía a su interlocutor y demasiado brevemente, como si no se fiara de su fiabilidad.
La inmigración, cuando pasaron a temas sociales, fue el punto más caliente de la noche. R estuvo elegante y listo al iniciar su exposición alabando las bondades de la llegada de extranjeros, mientras que Z acusó a su oponente de haber hecho más regularizaciones, pero ¿no son buenas?, no acabo de entenderlo. Aquí llegó el tema del bonobús, un golpe certero de Z que R pasó con risa nerviosa y desprecio inecesario. A todo esto Z era quien más interrumpía a su contrincante, lo cual, dado el esquema del evento, era de muy mal gusto. R lo hizo alguna vez, en la parte final de la noche, pero con menos incisión que Z. R utilizó una y otra vez la idea de lo que le interesa a los españoles, como si tuviera una bolita para saberlo. A mí nunca me preguntó y se atrevió a decir que Z se centró en cosas como la alianza de civilizaciones o la ley de memoria histórica que no interesan a nadie. Un desprecio intolerable y una falta de respeto impresentable para un candidato. Y Z tuvo algún acierto al recordar las medidas sociales (acertadas todas, cortas incluso para un gobierno de izquierdas) que R y su partido no apoyaron en el Congreso. Pero también, siguiendo en su línea de interrumpir, bromeo innecesariamente con temas como la seguridad, para buscar el desprecio innecesario de las ideas de R e incluso imita el modus operandi de R al hablar de lo que quieren todos los españoles. Que candidatos tan listos tenemos. R equivocó en esta altura del debate, responsabilicizar al gobierno de la no ilegalización de ANV y su posterior legalización, cuando todos sabemos que es la justicia, separada del gobierno por esa idolatrada constitución, la que actúa en estos aspectos. Incluso llegó a realizar alguna interrupción con excesivas dosis de mala educación, riéndose de las iniciativas de Z. Sí que estuvo elegante y lógicamente certero al mencionar las estadísticas de muerte por violencia de género. Y Z de igual modo supo utilizar la nefasta política de desacreditación que mantuvo los primeros años de gobierno el PP en el extranjero, encabezados por su enajenado expresidente. R acertó, por otro lado al mostrar con un dato eficaz su interés (yo no lo voy a dudar) por el medio ambiente recordando que siendo ministro él se creó ese ministerio. Y Z estuvo elegante al no recordar al primo. Pero es verdad que el pasado es un argumento que R, cuando utiliza Z, considera innecesario y que él utiliza cuando considera oportuno.
Y poco más, la verdad, salvo que tuve que luchar contra el sueño y que en las despedidas Rajoy estuvo muy poético y Zapatero prometió el mísmo trabajo que alude haber realizado en esta legislatura.
¿Que quien ganó?. Las encuentas dicen que el ciudadano le da la victoria a Z. Yo les doy un empate, y lo hago, entre otras cosas porque Z, que quizá estuvo mejor, se centró demasiado en demostrar las cosas que no habían hecho los gobiernos anteriores para ensalzar los logros del suyo. Vale como anécdota, como ejemplo, como aviso, pero no como base argumental. Los logros logros son estuvieran o no precedidos de una buena gestión.
Ahora, las mejores preguntas me las hizo mi pareja, ¿por qué mira tanto Rajoy a la izquierda?, ¿alguien más se dio cuenta? Y sobre todo, ¿qué van a hacer?. Porque apenas si intuímos, además de promesas manidas de trabajo, cuales son sus planes para el futuro. Se lo habrán dejado para la vuelta, nos consolamos ambos.

9 comentarios:

Pedro dijo...

Me cargó el moderador. Qué discurso-felción hizo al principio...
Y luego se dedicó a interrumpir antes de tiempo a los candidatos.
Los gráficos no se veían.
Muy mal Campo Vidal.
En cuanto a ZP, con lo mal que lo hizo sale como ganador en los sondeos. Vamos, que el 9M tiene mayoría absoluta.

Anónimo dijo...

Yo decidi ver "Aquí huele a muerto" de Martes y 13.....no digo más

CARLOS

Anónimo dijo...

Aclarar que mi hermano es un apasionado del cine de autor y/o cine de culto, como podéis ver. Le habrá picado el gusanillo con esto de los oscar (cine de culto???) y tal y tal.

De todos modos, “Aquí huele a muerto” es bastante más serio (y entretenido) que el debate de ayer, aunque los debatientes no tengan ni pizca de gracia.

Juanjo, el hermano de Carlos

Anónimo dijo...

Vi el primer bloque y para ver algo que no es serio, preferí entretenerme con otras instituciones de este país, Josema y Millán......de todas formas R, jugaba con ventaja; con un ojo tenía controlado a Z y al moderador y con el otro miraba susssh apuntes, al puto reloj. Inaudito!

CARLOS, el hermano del hermano de Carlos...bueno, Carlos, vamos.

Filoabpuerto dijo...

ja ja ja

Bueno, en el debate no "olía" a lo que dice ese titulo de la película, pero "olía" a más de lo mismo, nada nuevo que no supiéramos.

Faltó pasión, brillantez y naturalidad en ellos ¿o es pedir demasiado a los políticos?

Muy producto de "marketing" y "precocinado", Ambos se escabullieron repetidas veces cuando el otro formulaba preguntas directas. Además ¿por qué aceptar el bipartidismo? faltan otras voces a las que nuestro sistema "democrático" no da opción de compartir ese espacio

Saludos

Merce

Larrey dijo...

Es una idea muy interesante lo del bipartidismo, porque estoy observando en ciertos sectores de la izquierda (en mi entorno) la creciente idea del voto útil, que es la autopista más directa al bipartidismo. Y estados unidos, cuna del bipartidismo moderno, no me parece ejemplo de mucho

Anónimo dijo...

Bueno pues hay va mi opinion, como no decir que el Sr Rajoy fue el ganador absoluto , frente ZP "cejas puntiagudas", claro que voy a decir yo que soy de derechas


Vida

Larrey dijo...

Que seas de derechas, vida, no nos asegura nada, podría no haberte gustado tu líder, como a muchos de izquierdas no les gustó el suyo. Una ideología política no supone la asunción necesaria de la figura de su representante.

Dudu dijo...

Prepara papel y boli que el próximo lunes tienes trabajo. Estaría bien que hicieses tu crónica del encuentro.