ETA

Desde hace tiempo intento limitar los artículos sobre política, incluso sobre la actualidad. Creo que aburren, son siempre lo mismo y generan en mí la misma respuesta. Tengo la impresión de que, poco o mucho, todo lo que tenía que decir, ya lo he dicho. Pero estos cachondos de la capucha se empeñan en que sea reiterativo. Con lo que me gustaría a mí estar escribiendo ahora sobre un videojuego que han sacado que consiste en matar infieles para salvar a la Iglesia. Pues no, que vienen estos tipos y le ponen un chicle de odio a un coche y hala, a primera plana de los periódicos y una vida más truncada. Hemos tenido suerte, la suerte de que esta gente sea cada vez más chapucera, y no ha muerto nadie. Pero si de intención hablamos han matado a una persona, que era lo que buscaban. Lo mejor de todo es la indignación con la que se han manejado estos días con la detenciones del entorno batasuno. No, si todavía sonreirán socarrones y nos dirán, ¿veis?, el que siembra vientos recoge tempestades. ¿Y ahora qué?, ¿a decir lo de siempre?, ¿que no les entiendo, que si la violencia no es el camino, patatín patatán?. Pues no, estoy cansado de tener que decir las mismas cosas. Así que hoy voy a terminar con una frase que no es apropiada, que no está a la altura, que es grosera, pero es lo que me sale. ¿Sabéis una cosa tipejos de las bombas lapas?, puede que vuestras madres fueran unas santas, pero vosotros sois unos verdaderos hijos de puta. Vaya, si creo que hasta me ha sentado hasta bien.