ADRIAN: Hola, cari, ¿qué haces levantada?, ¿está bien el peque?.
ADRIANA: No, nada, está dormidito, es que quería darte las buenas noches.
ADRIAN: Ah, pues venga, un besete y a dormir.
ADRIANA: ¿Qué tal el hotel?.
ADRIAN: ¿El hotel?, pero cariño, si vengo tres veces al año, es el de siempre.
ADRIANA: Ah, es que no me acordaba, además, podían haberlo reformado o algo.
ADRIAN: Pues no, mira, no han cambiado ni las cortinas.
ADRIANA: ¿Te vas a dormir ya?
ADRIAN: No, tengo que repasar unos informes para la reunión. ¿ Y tú?, ¿no es tarde ya?.
ADRIANA: No, no tengo sueño, ya sabes que si no estás me cuesta meterme en la cama. Iba a ver una peli.
ADRIAN: Ah, genial, aprovecha para ver alguna de las que no me molan.
ADRIANA: Pero es que no funciona el disco duro.
ADRIAN: ¿Cómo que no funciona el disco duro?, ¿qué le pasa?, ¿qué te dice?, ¿se enciende?.
ADRIANA: Tranquilo, tranquilo, pues no lo sé, lo puse y nada.
ADRIAN: ¿Has puesto el auxiliar en la tele?.
ADRIANA: Ah, no, espera...ya, pero nada.
ADRIAN: ¿Has puesto el auxiliar uno o el dos?.
ADRIANA: El uno....
ADRIAN: Pon el dos, que el uno es el DVD.
ADRIANA: Nada, tampoco.
ADRIAN: ¿Has comprobado los cables de conexión a la tele?.
ADRIANA: ¿Cuales?.
ADRIAN: Los que hay detrás.
ADRIANA: Detrás no hay ningún cable.
ADRIAN: Pues por eso, búscalos, son los que tienen los tres cabezales de colores.
ADRIANA: Aquí están, ya los tengo. ¿Cómo los pongo?.
ADRIAN: Por colores.
ADRIANA: Es que hay dos rojos.
ADRIAN: Pues al rojo de abajo.
ADRIANA: Ya está. Nada.
ADRIAN: La otra parte, tienes que conectar la otra parte.
ADRIANA: ¿A la tele?. Es que no sé donde, porque es como un cable de casquitos, de esos de metal fino.
ADRIAN: Anda, cambia los cables, que has puesto los de la cámara.
ADRIANA: Claro, tienes tantos cables aquí, que menudo lío, esto lo tienes que organizar, porque no hay quien se aclare.
ADRIAN: Vale, tu busca unos de colores y al otro lado el euroconector.
ADRIANA: ¿Cómo euroconector?.
ADRIAN: ¡ El enchufe gordo y negro lleno de puntitas de metal !.
ADRIANA: Ah, pues dilo. Ya está, conectado. Pero nada, no sale.
ADRIAN: ¿Cómo que no sale?.
ADRIANA: Pues eso, que no sale.
ADRIAN: ¿Has encendido el disco duro?.
ADRIANA: Espera, ahora. Nada.
ADRIAN: Cariño...¿está enchufado a la luz?.
ADRIANA: Joder, anda coño, ¿y como lo dejas desenchufado?.
ADRIAN: Ay, madre. Bueno, ya se ve ¿no?, pues hala, siéntate en el sofá...¡ eso no, que eso es la silla!, lo que tiene brazos y parece una cama.
ADRIANA: Mira que gracioso, anda, vete a dormir.
ADRIAN: Adiós, mi vida.
ADRIANA: Adiós, gordo.
31 de octubre de 2007
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1 comentario:
Je, je... ¡esperaba!, esperaba ese final (también, nada machista. por otra parte, que se pueden intercambiar perfectamente los roles... y es que ¡hay que tener un cuidado!)
Abrazos
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