REFRANERO

Los refranes siempre acierta. Mierda, está lloviendo, si es que no llueve a gusto de todos, diría el agricultor que ver la tierra reseca como si fueran sus propias carnes heridas. No tuve ni que darle explicaciones, porque ya se sabe, a buen entendedor pocas palabras bastan. A poco que te sepas el refranero patrio eres capaz de encontrarle uno a cada situación. Y como las situaciones no son solo tan variopintas sino que pueden llegar a ser tan antagónicas siempre me producía una extraña desazón esa capacidad de acertar del refranero. Hasta que llegué yo solito a una conclusión que seguro muchos habían llegado antes que yo: cada refrán tiene su contrarefrán (y a la inversa, claro, porque qué fue antes, huevo o gallina...). De este modo la "academia de los refranes" se asegura, salga cruz o salga cara, tener una respuesta apropiada. Vamos con ejemplos. Alguien se presenta, por ejemplo, al examen de conducir. Ha suspendido ya dos veces, así que, aplicando el refranero ¿aprobará o no aprobará?. Pues muy fácil, si aprueba, alegría, porque a la tercera va la vencida, pero si no lo hace, pues consuelo, porque ya se sabe, no hay dos sin tres. Vamos con la climatología, que abril es un mes de lluvias, pues ya lo dice el refranero, ¿es que no lo sabes?, en abril, aguas mil. Pero, claro, y si caen cuatro gotas, pues no hay problema, porque las aguas de abril caben en un barril. Y tenemos ejemplos hasta en los chistes, porque un amigo una vez se encontró una cartera, muy, muy prontito, y otro le dijo, ya se sabe al que madruga, Dios le ayuda, a lo que el otro responde, pues no por mucho madrugar amanece más temprano, porque el que perdió la cartera se levantó más pronto que yo. Un bombero llegó con bastante retraso al incendio, a lo que los vecinos, quejosos, mascullaron a buenas horas mangas verdes. El bombero, tranquilo, cuando apagó el fuego bien pudo decir nunca es tarde si la dicha es buena. Si estoy trabajando y tengo muchas tareas pendientes, ¿qué hago?, ¿las termino todas a riesgo de equivocarme o las dejo?. Porque claro, la paciencia es la madre de la ciencia, pero como no hay que dejar para mañana lo que puedas hacer hoy. ¿Y con el agua?, ¿con el agua qué hago?, ¿la dejo correr?, porque agua que no has de beber déjala correr, pero claro, como el agua pasada no mueve molino, no sé que hacer...

En fin, ejemplos hay tantos como refranes, así que espero los vuestro...