18 de enero de 2008

AUTE

Hay personas a las que admiro por algo más que por el ejercicio de su profesión. Es curioso, porque me interesa de forma práctica solo como responden en ella (nunca me gustó la poesía de Sabina, por ejemplo, ni su forma de vivir) pero ejercen sobre mí una especie de embrujo que me obliga a interesarme por otros aspectos, costumbre esta que me regala no pocas decepciones. Porque puede haber, perfectamente, un escritor sublime racista, un músico genial misógino o un director de cine fascistas. ¿Sus obras van a carecer de la calidad que atesoran porque su autor me parezca moralmente un necio?. Una de estas personas es Luis Eduardo Aute. Es cierto que musicalmente nos hemos distanciado, y no es su culpa, es mía por la sobresaturación de cantautores, digamos que es una etapa de mi conciencia musical aparcada. Pero mantengo el interés por lo que saca al mercado y, sobre todo, cuando escucho o veo algo sobre él no resisto la tentación de interesarme. Ha pasado hoy, en la contraportada de El País. He visto su rostro envejecido, con esos surcos vitales tan seductores, y no he podido resistir la tentación de dejarme llevar por la entrevista. Pertenezco a la secta de la prensa escrita, así que caigo en sus redes siempre, y me dejo llevar primero por los titulares. "El peor enemigo de Dios es la Iglesia". Un buen comienzo, un juego de palabras interesante. Pero después se despacha diciendo que "ya no se hacen canciones, sino politonos". Que no deja de tener, en su fina ironía, un arte recurrente, pero decepciona pensar que este músico de la libertad condene otras creaciones y sobre todo en un tono tan fatalista, retrógrado y generalista. Mi amigo Gustavo, que tiene un grupo de Folk fusión que no sabría como definirnos, que es músico (entre otras cosas de las que hemos hablado) no hace politonos, ni mucho menos (aunque me encantaría escuchar eso de si quieres bajarte el politono el de los ojos saltones manda saltones al 7557...). Y como él, infinidad de músicos que hoy en día se ganan la vida, o lo intentan, con su arte musical. Esta sección del periódico se desenlaza en una comida, y ponen lo que comen y lo que cuesta. En este caso nuestro amigo Luisito se me despacha una Tempura de verdura, unas croquetas, unas cocochas a la brasa, unas albóndigas de ciervo con puré de hongos y una torrija caramelizada. No sé, me váis a perdonar, pero me hubiera gustado más que hubiera pedido un buen plato de jamón y un ajo arriero. El caso es que, casi abatido por el desánimo de tener que desmontar el altar transitorio de otro de mis ídolos, me he lanzado a la entrevista para redimirme, y ahora me arrepiento..."el toro es seducción y engaño. Es muerte, sexo, estética, riesgo, valor. Lo tiene todo". En fin, que pereza que me daba el tema de desmontar mitos lo hemos dejado ahí. Eso me pasa por leer.

1 comentario:

Pedro dijo...

Los poemigas de Aute están creca de los politonos, al menos de los sms.