24 de enero de 2008

ABORTO


No estoy a favor del aborto. Es decir, no quiero que nadie aborte. Estoy a favor de la República y lo que me gustaría es que los reyes y sus hijos tuvieran que trabajar y no representaran al Estado ni firmaran títulos universitarios. Pero a favor de que una mujer se vea en la obligación de abortar no estaré nunca. Nadie está a favor de eso, ni si quiera los que, por no estar en contra, nos dicen estamos a favor. Jamás podré estar en contra porque me parece ofensivo, arrogante y deshumanizado que desde la comodidad de mi sillón masculino me sienta autorizado a decirle a un torbellino hormonal, a una persona que está sufriendo todos los cambios a nivel físico, psiquico y moral, que conllevan un embarazo, que por mis santas narices (por no decir cojones, que venía mucho mejor) tiene que ser madre. Y no me vale el ¡ que se lo hubiera pensado antes !. Porque el principio del que se lo hubiera pensado antes se lo podríamos aplicar entonces a los borrachos, drogadictos, a los que se la pegan por ir a doscientos por hora, a los que no llevaban el cinturón, a los que bebieron al volante, a los que practicando un deporte de riesgo se parten una pierna...todos esos también se lo podían haber pensado antes.
¿Alguna de vosotras ha abortado?, ya sea de forma voluntaria o involuntaria. Evidentemente es una pregunta metafórica. ¿Y qué?, divertido ¿verdad?, es algo que una mujer hace una mañana y por la tarde está tomando cervezas con las amigas y charlando sobre el último modelito de Tom Cruise. Pues no, probablemente sea uno de los peores tragos de su vida, se mire por donde se mire, es un paso dificilísimo y puede dejar secuelas de muy diversa índole. Así que que nadie juzgue a la ligera a una mujer que interrumpe voluntariamente su embarazo, es una frivolidad inhumana hacerlo. Esas mujeres pasan momentos terribles sintiendo que una vida les crece en el interior, una vida que no les pertenece pero que, por la razón que sea (no seré yo quien las juzgue por eso) no es capaz de afrontar. ¿La adopción?. ¿No se da cuenta la gente que eso es ser madre?. Abortar es frenar el embarazo y si es frenar el embarazo es no ser madre. Dejar un hijo en adopción es ser madre. Creo que la diferencia es abismal entre uno y otro supuesto.
Por todo esto me parece retrógrado, cruel, descarnado y político, el revuelo que se ha formado en torno a la ley del aborto, que si de algo adolece, es de falta libertad, no de exceso de ella. Además, ¿cuantos años tiene esta ley?, ¿no se aprobó en el 85?. Pues ¿qué ha ocurrido en los últimos seis meses para que una ley que durante 260 no generó un movimiento similar sea tan ofensiva, inhumana e injusta ahora?. ¿Han cambiado algo los gobernantes socialistas o es que como siempre a las personas de cierta sensibilidad es fácil sacarlas de sus casillas para que acudan a la calle a pedir votos sin saberlo?. ¿En ocho años de gobierno de Aznar la ley estuvo fuera de juego?, ¿no había clínicas abortistas?. ¿no había mujeres condenadas al mal trago de interrumpir un embarazo?.
En fin, que al final es la historia de siempre, la raíz religiosa se adivina en gran parte de los zarpazos retrógrados de la derecha más oscura de este país. Y todos pueden opinar de todo, y tú vida no la decides tú sino los demás, que son más listos que tú. Es como el sol, la playa o el arte andaluz, que venían en el lote.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Una reflexion, si al padre desde el primer momento se le exige,faltaria mas, una responsabilidad irrenunciable en todos los sentidos. No tendria algo que decir en cuanto al aborto de su futuro hijo. ¿deberia ser unicamente decision de la madre?
por supuesto no hablo de casos extremos de violaciones o riesgo vital de la madre.
salu2

Larrey dijo...

Los padres siempre tenemos algo que decir hasta que la madre habla.
Luego a la madre se la puede decir que es tal o que es cual, pero ¿es sensato obligar a alguien a ser madre?¿eso es velar por la salud del bebé? en el fondo ella es quien decide (o debería, opino). Pero claro, si alguien está autorizado a opinar es el padre, el que más (o el único). En realidad cuando pienso en una mujer abortando voluntariamente me la imagino (por comodidad mía, supongo) acompañada del padre. Son dos quienes lo hacen.
Buena apreciación

Elena dijo...

Mi hermanana mayor adelantó lo que al final tendría que pasar. Su primer bebé deseado y querido no se estaba haciendo bien, su bolsa amniotica tenía un agujerito y perdía líquido contínuamente. No llegaría a final de embarazo. Un médico ginecólogo la ayudó a tomar la decisión. Ya en la clínica vió fetos en cestos de basura, y una mujer (enfermera o médico, no lo se) le dijo "demasiado mayorcita para tener descuidos ¿no?", "oiga señora, que no estoy aquí por gusto, este hijo era deseado y se me va a morir dentro, solo adelanto este triste final"....desde luego una experiencia para no olvidar.....Tengo 2 sobrinos bien majos.
bss. Elena