1 de septiembre de 2008

MENTIRAS


Hay mentiras que merecen ser verdad. Creo, incluso, que hay mentiras que el colectivo decide aceptar porque nos alegran la vida y nos ayudan a vivir. Seguro que las habéis escuchado. Me ha invitado a escribir una en concreto, muy de moda por lo de las olimpiadas: la muralla china es la única construcción humana que se ve desde el espacio. ¿No apetece que sea verdad?, ¿no sería genial ser astronauta atravesar no se cuantos miles de kilómetros y poder ver una muralla?. Pues resulta que es mentira. A mi me convenció Juan Esteban Beckman, profesor de astrofísica canario. Y la razón, además de evidente, es sencilla, lo impresionante de la muralla no es el grosor, sino la distancia (6.000 km) y pone un ejemplo de lo más clarificador, a una distancia de un par de metros, por muy largo que sea un pelo, por su grosor, es imposible que logremos apreciarlo salvo que la diferencia de colores (cosa que no ocurre con la muralla) sea muy evidente. No sé el origen del mito, pero seguro que su objeto era, o magnificar el Imperio Chino, o al ser humano frente a su insignificancia universal. ¿Y sabéis, curiosamente, qué es lo que sí se ve desde el espacio?, los invernaderos almerienses, por ser una superficie conjunta de casi 50 kilómetros cuadrados. Que cosas tiene el ser humano, venga a construir magníficas obras, inmensas creaciones para demostrar su poder y al final lo más visible es un huerto, inmenso, sí, pero un huerto al fin y al cabo. La verdad es que me pensándolo ahora me hace gracia, me gusta, porque total, una muralla ¿qué es sino un freno para la libertad humana?. O no deja salir a los que están dentro o no denja entrar a los que están fuera, así que prefiero que sean los tomates y los pimientos los responsables de nuestra visibilidad desde el espacio, sino ¿qué pensarían los estraterrestres de nosotros cuando nos encontrasen?.

1 comentario:

ralero dijo...

Sí, aunque los invernaderos almerienses también tienen lo suyo de muralla y de presidio. Y es que el apartheid y los guetos pueden tener apariencias de lo más variopintas.

Un abrazo.