15 de mayo de 2008

EL CHERIF DE COSLADA


No voy a hablar del macarra sin fronteras y sus colegas los extorsionadores barriobajeros. Para eso ya están los profesionales. A mí me ha dado por pensar en los daños colaterales, que es la gran aportación a la humanidad del amigo Bush. Eso y la guerra preventiva. Joya de hombre. Volvamos a Coslada. ¿Os imagináis ser policías ahora allí?. Eres un corrupto cabrón y extorsionador por llevar uniforme. Leí en el periódico que por la calle les insultaban o les acusaban de cobrar comisiones por el simple hecho de estar en un cajero automático. No voy a decir que la gente sea justa, entre otras cosas porque muchos esconde su cobardía bajo la masa y saben nadar solo a favor de corriente. Pero es verdad que cuando uno está amedrentado durante años cuando consigues alzar la voz puede que lo hagas más de la cuenta y no siempre de forma justa. Al parecer este tipejo se había granjeado el odio de sus conciadanos con mucha profesionalidad y paciencia, poniendo para ello todo su empeño y sapiencia. Y ahora la gente, que ve al animal enjaulado, gusta de vengarse a su manera. Pero no todos lo policías de Coslada son corruptos. Ya, lo sé, cuesta creerlo y puede que hasta encontralarlos si nos pusieramos a la búsqueda (visto el número de detenidos), pero no debemos tomar la parte por el todo. Cuenta en el mismo artículo como un niño volvió del colegio llorando porque sus compañeros de clase, que saben que su padre es policía local de Coslada, le insultaban y le decían que su padre iba a ir a la cárcel. Tal fue así que el padre se vio en la necesidad de acudir al día siguiente a llevar a su hijo (por horario nunca podía, y se buscó la forma) para que los compañeros vieran que él no era de los que estaban en la cárcel. No creo que esta persona, visto lo visto, que muy probablemente tuvo que luchar para mantener su integridad moral en una comisaría donde al parecer lo difícil era seguir siendo inocente, pague el pato de veinte indeseables que vivieron su ley como si Coslada fuera el oeste americano. Cuando a un gremio reconocible le salen una docena de ovejas negras, bien negras, es muy difícil quitarse el San Benito, y eso me da algo de pena.

2 comentarios:

ralero dijo...

Las "etiquetas" son unos de los elementos que más deterioran la convivencia humana, pero ¡como nos gusta colocarlas a unos y otros! Una lástima, como decía mi padre "no son todos los que están ni están todos los que son".

Abrazos.

Anónimo dijo...

Que muchos no pensamos por nuestra cuenta y a falta de criterio personal y propio, tiramos de "etiquetas", siempre se echa mano de chivos expiatorios....
Lo que dice más del que señala con el dedo que del señalado muchas veces

Saludillos