18 de diciembre de 2007

EL CANCIONERO


Estamos en navidad, así que tocaba poner un villancico. Y los he estado buscando, le he dedicado algo de tiempo y, la verdad, no he encontrado nada que sin acompañamiento de una buena botella de anis (vaciándola previamente, claro) resulte entrañable. Entonces he pensado que era el momento de volver a mis orígenes, de poner una nueva canción de Sabina. Pero no una cualquiera, una que hiciera un poco de Ciceron de mis sentimientos navideños. Y he encontrado una, en esta época de compras compulsivas y mazapanes, donde todo el mundo ha de fingir ser feliz y los problemas se aparcan (eso parece ser) durante dos semanas, he encontrado una, digo, que me ha gustado: Oiga, doctor.


Oiga, doctor,devuélvame mi depresión,
¿no ve que los amigos se apartan de mí?
dicen que no se puede consentiresa sonrisa idiota;
Oiga, doctor,que no escribo una nota
desde que soy feliz.
Oiga, doctor,devuélvame mi rebeldía,
ahora que a la carta ceno cada día
y viajo con American Express
algunas de las cosas,oiga, doctor,
que imaginaba odiosas…¿sabe que están muy bien?
Oiga, doctor,esta vez le falló la acupuntura,
¿acaso no le pago las facturas?
déjeme como estaba, por favor,oiga, doctor,
a ver si tengo cura,solo quiero ser yo
y ahora parezco mi caricatura.
Oiga, doctor,devuélvame mi fracaso,
¿no ve que yo cantaba a la marginación?
devuélvame mi odio y mi pasión,doctor, hágame caso,
quiero volvera ser aquel payaso
con alas en los pies.
Oiga, doctor,devuélvame mi excitación,
llevo ya cinco meses sin una erección,
incluso en un gimnasio me inscribí
pero no me curaron,oiga, doctor,
cada miembro me hincharon menos el viril.
Oiga, doctor,esta vez le falló la acupuntura,
¿acaso no le pago las facturas?
éjeme como estaba, por favor.
Oiga, doctor,que ya no se me empina,desde que me mandó
tener cuidado con la nicotina.
Nada de disimulos,la cumbre se me está
clavando por momentos en el culo.

No hay comentarios: