Rubén, dos años y ocho meses. Algunas veces habla, con la emoción, en un tono demasiado alto. Su padre le explica que ha de hablar normal. Mira, Rubén, habla normal: hola...Así, cada vez que ahora le piden que hable normal cambia el tono y vaya a decir lo que vaya a decir empieza siempre por "hola"
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