EL POLVO DE MARIEN

Vamos, ¿ a qué estás esperando ?, bésame, venga, ¿ no ves que mis labios y todo mi cuerpo te lo están pidiendo?. Me preguntó como besarás. Siempre han dicho que la gente como tú, de éxito, con un cuerpo de locura y una lista de mujeres que puede superar a la del Inem en mi país, en el fondo, sois tan egocéntricos que ni os preocupáis en...vaya, menuda sorpresa, que suavidad, me gusta. No, con la lengua todavía no, déjame que saboree tus labios, hay poca luz y no he podido soñar con ellos...son carnosos, me gustan, sabes a caramelo mentolado, cabrón, sabías que hoy tendrías jaleo ¿ verdad ?. Bueno, ahora voy a enseñarte como besamos las españolas cuando nos ponemos a cien...¿ qué ?, mira tío, no hables, voy a ser tuya, pero con paciencia. Voy a deleitarme un poco más con tus labios, saben bien y son cálidos y juguetones, muy juguetones...una...dos...y tres...ahí va mi lengua...te desconcierta ¿ verdad ? que sea ella quien te meta la lengua en la boca...no la escondas...ah, estás jugando, muy bien...no me importa...voy a darme un paseo por tu cuello...hueles a loción de afeitar, seguro que cuesta más que la matrícula de la mitad de las asignaturas de mi carrera...veo que te gusta...empiezo a notar una especie de árbol florecer entre tus piernas...eso, aplástalo contra mi...espero que no florezca más. O es una prolongación de tu pierna o tendremos problemas para que entres...joder, está a cien el tío...a ver si ahora me da su lengua...y todavía estamos de pie...es raro que no se haya lanzado ya a por mi culito...un español ya me hubiera desabrochado los pantalones y hubiera buscado mi coño para meterme los dedos...pero me gusta tu paciencia, forastero...ahora te toca a tí besarme el cuello...eso me vuelve loca, te lo advierto, me pone cachondísima, cuando perdí la virginidad lo hice porque el francés aquel me comió el cuello con locura y mi sexo daba palmitas...bueno, que jilipolleces se pueden llegar a pensar...eh, cuidado, no muerdas, así...muy bien, suavecito...anda, ya te decides, ahora vas a por los pechos, bueno, eso también me gusta...qué delicadeza...joder, cómo se me están poniendo los pezones...despacio cariño, así, suavecito...muerde un poco...muerde...así...joder...vamos, con toda boca...¡ no !, no pares...¿ qué haces ?...bueno, yo me dejo llevar...bueno, ahora me levatas como si fuera tu mujer cruzando el umbral del matrimonio... ya te has cansado de juegos en el salón ¿ eh ?...pues estás fuerte, porque peso lo mío...la verdad es que a mí también me apetecía una cama...pero ahora mando yo ¿ vale ?...vamos, a la cama...así, y yo sobre tí...sigo notando ese árbol entre tus piernas, no te preocupes, ya le dedicaremos tiempo...mira mis pechos...¿ te gustan ?...eh, ahora nada, sólo mirar...nada más que mirar...si quieres me acaricio yo un poco, eso os pone a cien...te gusta ¿ verdad ?...mira, los acaricio con dulzura, eh, tus manos quietas...ahora me toca a mi...tu también tienes los pezones como una piedra, y saben salados, te gusta que te muerda ¿ a qué sí ?...ahora quiero que nos desnudemos del todo...no, quito en la cama...quiero que me veas desnudarme, despojarme de todo, despacito...eso, tu también...¡ joder, hijo mío !, lo que guardabas debajo de los pantalones...esta noche promete, si esa cosa no pierde la arrogancia que tiene ahora la noche va a ser muy, pero que muy larga...lo siento, pero no resisto más, ya no aguanto...túmbate...necesito metérmela en la boca...está salada...y caliente...ardiendo...me encanta su sabor, es un subidón de adrenalina impresionante, y que tengo amigas que no disfrutan de esto...me encanta como se ponen, son manejables...un poquito de suavidad, dos lengüetazos sabios y se vuelven dóciles...pero tienes prisa ¿ no quieres que siga ?...ah, que me toca a mí, eso me gusta, que seas generoso...sí, claro que yo tengo algo entre las piernas deseoso de conocer tus labios...ven, mira, está de par en par para tí...ohhhhh...síiii, así, suavecito, no, el dedo todavía no...bueno, lo que quieras...vamos, ahí arriba, eso es...dentro con profundidad, pero sin movimientos bruscos...¿ dos ?...eso es demasiado tentador, no aguantaré...no sigas o me correré en tu boca...basta, metemelá de una vez, no aguanto...así...¿ qué haces ?, ¿ y ahora donde vamos ?...¿ no me digas que volvemos al salón ?...para que nos incorporamos...Dios mío que cuerpo tienes...¿ qué haces ?, ¿ no creerás que estás grabando una de tus películas ?...¿ contra el espejo ?...mira, mi respiración deja vaho...y el cuerpo me suda...ah, que no soy una detenida, parece que me vas a cachear...joder, noto todo tu cuerpo, sobre todo esa parte caliente en mi espalda...pero no la quiero ahí...oh, no, la nuca no, eso sí que no lo resisto...¿ ya te decides ?...¿ eso es un preservativo ?...espera, quiero despedirme de su sabor...bueno, vale, como tu digas...suavecito, muy suavecito...esto es nuevo...nunca había estado de pie y menos de espaldas...ummmmmm...se nota que no es el primer sexo en el que entras...sigue...así...eso es, eso es lo mejor de esta postura, me dominas pero me puedes acariciar a la vez que me follas...joder, joder...vamos...sigue...sigue...sigue cabrón...me voy a correr...más fuerte...más fuerte...
- ¡ Marién, por Dios !, que llevas dos horas en la ducha...
- Esto...ya voy mamá...mierda Brat, otra noche será...pero te juro que estaba a punto, de verdad...a punto...mierda...
- Vamos, hija, que te estoy esperando ¿ se puede saber qué estás haciendo ?.
- Nada, mamá...nada.

nota: este relato fue escrito en el siglo pasado.