Ayer no logré mi objetivo con el cuento. No conté lo que quería contar y, contra mi costumbre, me gustaría explicarme.
Como a otras muchas mujeres en el mundo, el miedo le impedía salir del oscuro mundo de la prostitución, y en su caso era todavía más doloroso, porque su proxeneta y ella llevaban el mismo anillo de casados.
La idea me surgió de las señoronas que recelan de la prostitución. Después me pudo más la reivindicación de género, y pensé en todas esas mujeres sometidas por sus maridos en una espiral de violencia, una prostitución más si tenemos en cuenta que esa violencia incluye no pocas veces el sexo. Pero en origen quería enfretar a esa mujer de edad y de alta cuna (y baja cama que decía aquella) que mira a las prostitutas por encima del hombro, con la evidencia de su propia realidad. Me puede su arrogancia de mujer decente, cuando ella lleva décadas follándose desganada a un marido por una seguridad económica y social. Y no soy quien para juzgar las razones por las que una persona decide acostarse con otra, o casarse, o hacer ambas cosas, o ninguna. No, mi idea era precisamente que ella, la señorona, no cae en la cuenta de que es un cazador cazado, pues su vida, sin saberlo, ha sido la de una prostituta, que por dinero, seguridad, fama, tranquilidad, folla ¿qué otra cosa es si no una prostituta? la que entrega sus conocimientos y su cuerpo para el desquite carnal de otros. Si el cliente es uno, siempre le mismo, y la transacción económica no es muy clara, sino continuada y socialmente aceptada, estaríamos hablando de muchos de los matrimonios que pueblan la sociedad y la historia española. Esa era la idea ni de lejos alcanzada por mi cuento.
3 comentarios:
Pues sigue intentándolo,que el fondo es muy bueno.
Besos!
Aaaaaaah, ya. En el fondo es que este lector fue muy torpe. Ayer tuve un mal día.
Me quedo con el post, es mucho mas clarificativo???. Tienes tooooda la razón, ¿como a un pivón que puede tener a otro pivón, se va con (por ejemplo) el jefe de la RENAULT, mayor, gordo y rico?....pues eso, que tú mismo lo has dicho. Buenas noches.
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