28 de diciembre de 2010

SOMOS UN PELIGRO


Estoy muy preocupado. Somos un peligro. Sí, mi pareja, mis hijos y yo somos algo así como los terroristas de la familia. Con nuestro modus viviendi vamos atentando contra toda familia de bien que se nos ponga por delante. Mi hijo pequeño les roba a los demás los juguetes en el patio de la escuela. El mayor pone la zancadilla a todo hijo de padres casados que se le cruce por el colegio y en unos años les robará las novias al grito de ¡viván los pecadores! Yo me cuelo en la cola del mercado delante de la señora María porque sé que está unida en santo matrimonio con Manolo. Y mi pareja acelera en los pasos de cebra cuando una familia al uso y agrado del santo padre quiere pasar al otro lado. Lo ha dicho Juan Antonio Reig Plá, todo un obispo. Tenemos la culpa de todos los males de esta sociedad. Somos el cáncer. El tumor a extirpar y unos soberbios al considerarnos, válgame la Virgen del Santo Trapo, una familia. Según sus santas palabras la sociedad está de capa caída por asesinos de la tradición como nosotros. Mi pareja está en serio riesgo de recibir un puñetazo y mis hijos de crecer en un entorno desestructurado que esparcirá su maldad al resto de los cristianos. A mí lo que me dan ganas es de acercarme a Alcalá de Henares y regalarle un par de hostias , que ya encontraremos quien se las consagre. Porque en un minuto de nuestras vidas encontrará más amor que en miles de ellas que él fuera capaz de desperdiciar.

3 comentarios:

Dafne dijo...

uyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyyy.....no repartas hostiasssssss... paz y amorrrr.

BOn dia!

Lou Perea dijo...

Pobre el obispo ese, qué escasez de neuronas, qué pobreza en el pensar, qué miseria en el sentir y qué manera de cagarla al hablar. Por más que suene burro, sí que se merece un par de hostias, acompañadas de un navideño "fun, fun, fun".
Hay tantas formas de familia como maneras hay de amar.

Lou

Elena dijo...

Cuando vayas me llamas....y sí, sois una familia ejemplar....y tú sobre todo como padre helicóptero (lo dice el Tir).