3 de marzo de 2011

LO QUE DUELE ES...


Seguro que os ha pasado. Y perdonadme el acceso sexista, que lo es, pero si eres mujer es mucho más probable. Vas por la calle o por unas escaleras, ese escalón tonto, ese bordillo hasta entonces invisible que se torna visible en el peor de los momentos, en el más cabrón de ellos, y tu pie, hasta ese instante certero poseedor del don del movimiento, colisiona con una parte y el otro, envidioso, que no sabe si ir o volver, si volver o quedarse allí, se suspende en el aire en espera de acontecimientos; las rodillas que no se enteran ni del nodo embutidas en tu preciosa minifalda, las manos, ágiles, que buscan el mejor lugar del suelo para sostener todo el peso de tu cuerpo, en previsión de una caída. Y pum, la previsión se cumple: caes al suelo. Lo primero que haces, sí o sí, si estas en la calle, es mirar si alguien te ha visto. Si hay alguien, al instante te pones en pie, recompones la figura a una velocidad que ya la quisiera una top de la fasiongüik y continúas caminando, como si nada, con una amplia y fingida sonrisa. A la vuelta de la esquina sí, ahí entonces ya te paras, gritas, te acuerdas de lo más sagrado para destronarlo a blasfemazo limpio y miras si te has hecho daño o lo que sería peor, si la falda o la chaqueta ha sufrido algún daño. Nos ocurre a todos, porque lo que más duele en una caída en la calle es la vergüenza ¿o no?

2 comentarios:

Larrey dijo...

El acceso sexista se refiere a la propia vergüenza...¿por qué me sentiré en la obligación de reiterar algo así?...

Elena dijo...

El otro día nos ayudaron a mi santo esposo y a mi a levantarnos del suelo. Iba agarrada del brazo de él. Llovia mucho. Pisamos (cuesta abajo) una alcantarilla de chapa. El patina (como las pelis) con una pié por delante y de culo va al suelo. En su caer, solo me da tiempo a decir TIR!!! cuando yo entro en la alcantarilla y veo mi pie a la altura de mi cintura...después el cielo. Nos miramos serios. ¿TU CADERA? bien, ¿TE HAS HECHO DAÑO? no, ¿y tu? tampoco...(toda esta conversación en el suelo). Vienen dos matrimonios a socorrernos. Gracias, gracias... y caminando bajo la lluvia, riéndonos de la caída tan jilipollesca, él me dice ¡ME HAS PISADO EL GEMELO JODIA!...AYSSSSSS.....ja,ja,ja,. Bss Larrey