el trastero de la imaginación

 EL GANADERO: 

Acabo de escuchar en televisión a un ganadero defender el "arte" del toreo. Me parece lógico, no hacía más que defender su negocio. Pedía, incluso, el mismo nivel de atención todo el año que para los encierros pamplonicas. Intuyo a qué perfil político se siente afín este hombre, así que que revise las bases de sus políticas, por aquello del mercado, que se regula solo. Así que si no interesa la tauromaquia, por algo será. En defensa de su sardina, este hombre ha hilado muy fino, que había escuchado a algún periodista, o político, no lo recuerdo, decir que por la mañana los toros corrían y por la tarde eran asesinados. Y que eso era incorrecto, porque asesinar, solo se puede asesinar a las personas. Esta defensa de la Real Academia y este rigor podría haberlo mantenido cuando ha afirmado que el toro es un animal tan especial porque cuando se sentía acorralado no huía sino que embestía. Bueno, pues yo le sugiero que para la próxima tarde de "arte" cambien un astado por un león, total, en cuanto se sienta intimidado por los setenta quilos embutidos en el traje de luces, va a salir huyendo...Es lícito defender tu negocio, pero también es lícito, para quienes escuchamos, meterte en el cajón que nos resulte interesante.