NOS HAN PRIVADO

La sanidad madrileña ya ha dado el paso. Gracias a él los madrileños estamos privados…de un derecho fundamental: la sanidad pública. Siento una profunda tristeza de que hayamos sido capaces de permitir esto…y siento la crudeza, sin que corra la sangre. Nuestro borreguismo (y me incluyo) es de traca. Y aun admitiendo esta evidencia, me queda una pregunta, digamos de índole técnica: ¿qué va a hacer la empresa adjudicataria cuando una operación, centro u hospital no sea rentable?¿Lo va a cerrar?¿va a denegar el derecho a sanidad a españoles (ya no hablemos de extranjeros...) porque el dinero que va a recibir no va a cubrir costes?¿entonces pedirá una compensación al Estado? Porque si es así el negocio es redondo, la empresa ni se molestará en gestionar bien, bastará con poner la mano al final del trimestre, o del año, hacer balance y listo. Todos los que tenemos dos dedos de frente sabemos que la sanidad pública es deficitaria. Pero también conocemos todos casos de operaciones que se han complicado en la privada y que han derivado a la pública. ¿A qué pública se va a derivar ahora? A todo esto no podemos olvidar que vender la sanidad pública a una empresa privada porque ellos lo harán mejor es admitir que uno es incapaz de gestionar aquello para lo que ha sido elegido en las urnas: lo público. Porque ser político y vender lo público ¿qué sentido tiene?¿qué trabajo le queda si la tarta pública va a ser privada? Puestos a ello yo retomaría mi vieja idea y daría un paso más, privatizando el Congreso. Estoy seguro de que los políticos de Eulen o Prosegur lo harían, como mínimo, tan mal como los que ahora tenemos. Si nos ahorramos una pasta, pues mira, eso que salimos ganando.