FELIZ 2024...

 DICTADURA Y OPOSICIÓN: 

Esto es una sugerencia para Feijoo, Abascal o para la querida presidenta de ésta, nuestra, comunidad. En fin, todos esos que desde la oposición hablan de gobierno ilegítimo y, sobre todo, de dictadura. Vayan a la cocina, abran el congelador y métanse dentro. Aguanten ahí unos minutitos. La temperatura rondará los treinta grados bajo cero, grado arriba, grado abajo. Cuando tengan las orejas con escharcha respondan a esta pregunta ¿en qué lugar de la tierra puede hacer ese frío en estos momentos? Les ahorro yo el esfuerzo: en el Ártico. Y ¿saben quien está en el Ártico, en la inhóspita colonia penal IK-3 de Jarp? Navalni, el disidente y opositor ruso. Con este sencillo ejercicio podrán acercarse, aun de lejos, pero acercarse, a sentir lo que es ser un opositor en una verdadera dictadura, aun democrática. Quizá después se piensen un poquito el uso de tan gruesas palabras para tratar de medrar y sacar la cabeza de la oposición. No soy optimista, la verdad, pero tenía que decirlo. 

 AL MENOS ES MÚSICA: 

No me gusta nada, pero nada, nada en absoluto, la música que escuchan mis hijos. Sobre todo el pequeño. Simplona, oportunista, facilona y misógina, no diría que necesariamente por ese orden. Y, en cambio, me gusta que la escuche, al menos escuchan música. Cuando me atronan los oídos en sus largas duchas (es una tarea pendiente la de reducir el consumo, mea culpa) me siento satisfecho y me imagino a mis padres renegando de las estrofas roqueras de Barón Rojo cuarenta años atrás. No tengo ese sentimiento de superioridad generacional. Lo veo en clave literatura, campo en el que no he tenido tanta suerte, salvo que decidieran decantarse por Mein Kanpf, me bastarían con que leyeran. Viéndolos con un libro en la mano ni se me ocurriría cuestionar las orientaciones de su afición lectora. De momento es ciencia ficción, pero no pierdo la esperanza. Por eso tampoco digo nada sobre su música, salvo que me pregunten y compensar de vez en cuando con lago de rock, y mucho jazz, que últimamente nos acompaña en las horas de lectura, que en su caso son de perrería sin más o de consulta del móvil. Escuchan música, es lo mínimo que puedo pedirles, de ahí todo será mejorar. Poco a poco...

 PACTAR:

Tengo un defecto de serie. Es verdad que soy un pesimista realista, que me pongo en lo peor pero sin dramatismos, solo por tener los pies al ralentí por si hay que saltar. Eso no quiere decir que audite el futuro con fruición. No, ya quisiera. Pero es verdad que me gusta valorar lo que hacen los demás a toro pasado. Llamadme oportunista, que lo seré. El caso es que, por ejemplo, en el gobierno de coalición, ya sea una comunidad autónoma con VOX o un ayuntamiento con PNV o la presidencia nacional con BILDU, me gusta ver en qué se nota el pacto para ver si me parece positivo o no. 

Os pongo un ejemplo. De momento, para mí, si Bildu sigue en esta dirección, le doy el aprobado sin paliativos...

Es verdad que, como ciudadano, no voy a conocer todos los detalles, solo los que los medios quieran mostrarme, pero ese problema lo tienen todos y no les impide opinar. No seré el único ultracauto del universo ¿no?

 DECEPCIONES REALES:

Imaginad, mi hijo no se ha ido esta mañana dejando la habitación recogida. No ha sacado todos los juguetes que todavía tiene en un armario, que es como su santuario a la infancia perdida, para poder quitar el polvo. No ha sacado la cama supletoria para aspirar y fregar por debajo. Ni ha pasado un trapo por las juntas de las ventanas, que no ha desmontado para poder limpiarlas por fuera. No ha usado el Pronto para adecentar la puerta. Yo podría sentirme decepcionado pero ¿quién sería el responsable, él por no estar a la altura a mis expectativas o yo por poner en él unas expectativas inalcanzables? Me inclino por lo segundo. Eso me pasa a mí con el Rey (éste y el anterior, que de tal palo...) He escuchado a varios políticos decir que el discurso de Navidad de su majestad ha sido decepcionante. Pues la culpa no es del Rey, amigos, sino vuestra, por esperar algo distinto. Por esperar, en realidad. Para mí ha estado a la altura, la de siempre, no hay necesidad de explicaros donde la pongo yo. El discurso del Rey ha estado a la altura de su emisor. Punto. Lo contrario hubiera sido una sorpresa.

!!! YA TENGO MI CANCIÓN ¡¡¡¡

Gracias Mariete...

Si queréis conocer más canciones de este artistazo...

 OMBLIGUISMO: 

Feijoo dice que para reunirse con Sánchez, como presidente electo el uno y de la oposición (ah, y ganador de las elecciones, que no se me enfade) el otro va a necesitar de un mediador internacional. Me gustaría pensar que no lo he entendido bien, porque entonces a quien no entiendo es al partido de la oposición, que debe considerarse, para lo bueno y para lo malo, el centro del universo patrio. Resulta que le afean, por tierra, mar y aire, al gobierno de Pedro que haya traído a un mediador internacional para la negociación de la amnistía. Que eso es internacionalizar los asuntos españoles. Y resulta que para una mísera reunión entre el líder de la oposición y el jefe del gobierno, algo rutinario, sí que conviene internacionalizar los asuntos internos. ¿Estamos a setas o a rolex, Albertito? ¿Se debe o no se debe internacionalizar los asuntos patrios?¿o solo depende de si les viene a ustedes bien? Es que esa es la impresión, oiga, que ustedes tienen un concepto de lo correcto que incluye la variable del ejecutor, si lo hacen ustedes está bien, si lo hacen los otros, siempre, siempre, siempre mal. Es agotador. 

 AY LAS METÁFORAS: 

Dice Feijoo que él sería incapaz de darle la alcaldía a un partido que ha matado a sus compañeros. Lo dice porque con los votos del Psoe Bildu alcanzará la alcaldía de Pamplona. Pura política, por cierto. Y yo he decido extrapolar su metáfora a mi prisma particular. Que no hay posibilidades de que el bueno de Albertiño se pase por este rinconcito, pero ¿y si sí? El caso es que yo jamás votaría a un partido político que llevó a mi abuelo a un campo de concentración. Porque el Pp, amigo Alberto, fue fundado, entre otros, por Manuel Fraga, ministro franquista. Y si tú has decidido vincular de por vida a Bildu con ETA ¿por qué no puedo hacer yo lo mismo con Franco, la dictadura, los fusilamientos, las cunetas llenas de muertos que no se desentierran con tu partido? El problema de las hipérboles es que no son fijas, no las podemos dejar en nuestro terreno. Y cuando las sacan, cuando muestran la cara B es cuando te das cuenta de lo poco firmes que son los cimientos. Y así, al menos yo lo veo de este modo, no se va a construir jamás un edificio estable. Pero como ya he dicho en otro artículo, es vuestro negociado, si no os dais cuenta de que no funciona, porque seguís en la oposición, ya no es mi problema. Bastante tengo con lo mío. Como reza una futura camiseta: si rebuznan es porque avancemos. Pues eso, que rebuznen. 

 UN POCO DE HUMOR, CON MÁS CRÍTICA QUE COJERA: 

 REESCRIBIENDO: 

Se titula "Diez caminos y un paseo". Fue mi primera novela. Este año cumple los 30. Me hace viejo, pero también mucha ilusión. He tomado el impulso, para el que nunca encontraba fuerzas suficientes, de reescribirla. Por suerte he aprendido mucho en estas tres décadas, así que la mejora será sustancial. Pero creo que es una obra distinta, primero, por ser la única que, al cien por cien, está inspirada en un tiempo pasado (año 1975) y segunda, por la forma de contarla. Mientras me decidía a aceptar que quería ser escritor, le daba mucha importancia al como. Cada novela era un reto narrativo en si mismo, en el que la forma de contar lo condicionaba todo. Creo que las ocho o diez últimas novelas siguen siempre el mismo patrón, uno en el que me siento cómodo y que he adoptado como mi lengua materna escribiendo. Por eso me he puesto al tajo. Y lo estoy haciendo con calma, aceptando que debo darle empaque, no solo limar los muchos fallos que voy encontrando. Al final, entre nutrir unas cosas y otras, resulta que ahora mismo, y por eso me apetece contarlo, acabo de escribir una palabra y el contador de word me informa de que la novela pasa a tener 280 páginas (en origen había nacido con 174) ¿Qué significa eso? Pues que pasa, de manera oficial, no solo a ser mi novela más antigua, sino la más larga de todas. Enhorabuena. Me apetecía contarlo, disculpad. 

 CRÍMENES DE GUERRA: 

Hay cosas que no entiendo. En la guerra se mata ¿verdad? Pues resulta que hay crímenes dentro de la guerra, que no son la muerte en batalla, sino otros. Unos valen, otros no. Y esto es porque hasta en algo tan nefasto, caótico e inexplicable como una guerra hay normas. Lo estamos escuchando estos meses más que nunca: Israel se está saltando las normas internacionales de la guerra. Es que voy a escribirlo y me entra la risa, no lo puedo evitar: ¡ hay normas en una actividad enfocada a matar a otro! puedo matarlo, que es lo peor que se puede hacer a un ser vivo, quitarle la condición de vivo, pero no puedo hacerlo de cualquier modo, sino respetando unas normas. Yo entiendo que en el boxeo, que también hay hostias, haya normas, al final los dos quedan vivos y pueden discutir después si se respetaron o no. Pero, a ese niño palestino al que han amputado las dos piernas y ha muerto en un hospital sin luz ¿qué cojones le importan las normas de guerra?  

¿De qué sirve una norma que no se puede aplicar? Imaginad, está prohibido circular a más de 120 pero cuando te pillan no te pasa nada, no hay consecuencias, no te multan, ni inmovilizan tu vehículo...¿para qué sirve? Lo normal es que las medidas estén enfocadas a que no vuelvas a hacerlo, que no te salga rentable. Si ponemos una norma es para regular su incumplimiento. Si hay normas para la guerra, habrá normas para su incumplimiento y estas deben estar enfocadas a que se dejen de incumplir. Pero esto es el misil que se muerde la cola, y entre unos y otros, bomba que te crío, al crío.

Y ya por último, según la RAE normas son reglas que se deben seguir o a que se deben ajustar las conductas, tareas, actividades. Las reglas las acuerdan las personas, se sientan, discuten, determinan, escriben y acuerdan. Es decir, a lo largo de la historia se han ido alcanzando una serie de acuerdos para normalizar lo que era legal o no hacer en la guerra. Y hasta en eso hemos ido evolucionando, porque en la Edad Media, a lo mejor, era legal el empalamiento del enemigo y ahora no. Supongo. El caso es que si hubo reuniones en el pasado ¿por qué no lo hacemos ahora? Nos sentamos y determinamos las nuevas reglas de la guerra: en lo sucesivo, y para que surta efecto, los representantes de las siguientes naciones, firmamos y acordamos que para batallar, solo será legal el juego de Piedra, papel o tijera. En su defecto se admitirá pares o nones y la moneda al aire. 

Digo yo...

 FUMAR O NO FUMAR...A MI LADO, ESA ES LA CUESTIÓN: 

Lo recuerdo perfectamente, el primer lugar en el que no dejamos fumar fue en el coche. Ambos, mi pareja y yo, no fumamos pero compartíamos espacio con un porcentaje de personas (entre la mitad y dos tercios por entonces) que sí eran fumadores. En casa, hasta el nacimiento del primer hijo del grupo, se podía fumar. En todas. Con la llegada de Dani, el hijo de unos de nuestros mejores amigos, nos dimos cuenta de que fumar era malo para ellos. Entonces, de forma automática, los fumadores, todos, sin excepción, empezaron a ocupar balcones, terrazas, cuando no la calle de forma directa. Hace de esto 24 años. Hasta entonces nadie en mi entorno se había planteado si fumar era molesto o no para el que tenía al lado. De hecho empecé a trabajar y aun se podía fumar en los puestos de trabajo. ¿Qué quiero decir con esto? Que hay realidades asumidas que necesitas que alguien sacuda para que te des cuenta de lo molestas que son. Los bares eran odiosos y no lo sabíamos, lo sabemos ahora que no se puede fumar en ellos. Y yo, al menos, si hubiera unos que sí y otros que no, jamás entraría en uno de los que sí. Llegó un gobierno valiente que se atrevió a regular, con más sentido común que de momento la historia parece concederle. El mundo conocido iba a desaparecer, entendiendo el mundo, como el ocio patrio. No ocurrió, es más, recibió un peculiar impulso al rentabilizar espacios exteriores fuera de verano que antes eran obviados. Ahora se plantean prohibir que se fume en las terrazas. Y ya no necesito la prohibición, porque a mí me molesta, y si puedo, me cambio de sitio. Jamás le diría a nadie que dejara fumar si se puede hacerlo. Pero si ahora tuviera un hijo, estuviera con mi carro y no encontrara un lugar donde sentarme, antes de perder mi derecho a tardear, pediría, muy educadamente, eso sí, a esa persona que fumara en otra dirección, al menos durante el tiempo que mi hijo estuviera a tiro de sus bocanadas. Todo esto es necesario, como las cacas de los perros, por la falta de educación. Quizá hasta que no te sacudan, puedes escudarte en la rutina, pero ahora que somos conscientes, sabemos que fumar, y no limpiar la mierda de nuestro perro, molesta. Así que de nuestra educación depende, si es necesario regular, multar, prohibir, es porque no somos lo suficientemente educados. 

 RESPUESTAS COMPLICADAS: 

El castellano es difícil, eso lo sabe el guiri que estudia en la academia Sígueme de Londres y termina haciendo su primer viaje a Jaen. Pero que no se inquiete James, que es difícil hasta para los españoles. En lo más simple. Os pongo un sencillo ejemplo: ¿no hay preguntas cuya respuesta, siempre, siempre, genera confusión? Y no me refiero a cuando tu pareja te pregunta si el vestido la hace gorda, eso pertenece a otro departamento. Os comento dos que, se responda lo que se responda, rara vez se entiende. Seguro que os ha pasado, ya sea como el que busca, como el que tiene. Estás en una terraza, hay más personas para sentarse que sillas. Miras a un lado y a otro y encuentras a dos tipos con tres sillas. Te acercas, preguntas ¿está ocupada? ¿Tenéis clara la respuesta a la primera? Porque quizá ellos esperan la pregunta de ¿me puedo llevar la silla? y no terminan de escuchar la tuya. Entonces ese no, no tienes claro si es que no está ocupada y sí te la puedes llevar o que no te la puedes llevar porque sí está ocupada. Aparentemente no hay motivo para la confusión, por eso digo que el castellano es complejo, porque me ha pasado tantas veces que me niego a pensar que soy el único. Y voy con la segunda. Esa no entiendo como no genera un conflicto constante, porque la respuesta en modo monosílabo, que suele ser la habitual, es imposible que se entienda a la primera. Me refiero al tipo de preguntas que empiezan con el ¿Sabes si? Por ejemplo: ¿Sabes si Larrey ha publicado hoy su artículo en El Trastero? Si respondes que sí, ¿qué respondes?¿que sí lo sabes o que sí lo ha publicado? Con el no, la duda es la misma, ¿no lo sabes o no lo ha publicado? Así que, querido Guiri, no eres tú, es nuestro maravilloso y alambicado idioma. 

 SE LO TIENEN QUE MIRAR: 

Los asesores de los políticos de la oposición se lo tienen que hacer mirar. Yo entiendo la estrategia del exabrupto, del todo está fatal, de nos vamos a la ruina. Pero abusan de algo tan simple con tanta insistencia que lo han desgastado por completo. La idea de esta es la mayor xxxxxx de la historia. Llevamos con el peor gobierno de la historia desde Zapataero. Cada uno peor. Cada iniciativa es la mayor ofensa a la democracia de la historia, siempre un poquito más, aunque pareciera imposible, por las venas del cuello encendidas y los chorros de lava en las redes sociales, que la anterior. Y eso, por una cuestión matemática y de sentido común no es posible. Así que hay que seleccionar, no puede jugar el Madrid el peor (o mejor) partido de su historia cada domingo. Si un periodista deportivo usara esa estrategia, estaría escribiendo en La Farola en mitad de temporada. Y eso, estando en la oposición ¿no se les ha ocurrido que forma parte de la razón de la oposición? Tanto va la exageración a la comparativa, que terminó rompiéndose. Moderación y selección, aunque solo sea por una cuestión práctica. Y lógica, porque gobernar, siguen sin gobernar...

 BARRIOBAJERISMO POLÍTICO: 

No es nada nuevo. Esa figura, la del macarra del chascarrillo que ejerce de parapeto ya existía desde los tiempos del otrora socialista González (Alfonso Guerra). Por eso no me sorprende el nivel de Oscar Puente respondiendo en redes sociales a la presidenta madrileña. Lo que me sorprende es que lo haga un ministro, y por ende, sabiendo como se pone, que lo hayan elegido como tal. Me parece un error. Es bueno tener gente que baje al nivel en el que se ponen en la oposición, pero no en puestos de esa relevancia, donde la contención debe ser la norma. Hay que saber donde tiene uno los pies antes de abrir la boca. Su trabajo debe ser la dirección de un ministerio, no apoyar los codos en la barra del bar y lanzarse al exabrupto, por muy ingenioso que éste sea. Que los votantes de la derecha, si quieren, se preocupen de quienes desde la cabecera de sus instituciones están a ese nivel. Yo, como votante de izquierdas, preferiría que en los ministerios hubiera personas preocupadas por su ministerio y no por x o como quieran llamarlo ahora. Todos tenemos ganas de gritar que también nos gusta la fruta. Pero yo soy un mindundi y me lo puedo permitir. Él no debería. Para otro capítulo dejaremos la piel intermitentemente fina de quien se ríe cuando una presidenta de una comunidad llama hijo de puta al presidente de todos españoles y se rasga las vestiduras porque lo bloqueen en las redes sociales. Esa es otra historia. 

 ¡¡¡¡ AURICULARES PARA TODOS !!!

Hay gente generosa por demás. Son esos donantes de audiovisuales, que gracias a la universalización de los dispositivos móviles, puedes encontrarte en cualquier rincón de tu ciudad. Proliferan, como las setas en los días de lluvia, sobre todo en el trasporte público. Es una especie endogámica muy común del subsuelo, debe ser que la oscuridad y el traqueteo les sienta muy bien. Da igual procedencia, incluso edad, porque uno tiende de pensar que son más bien jóvenes, pero hete aquí que me encuentro en la sala de espera de un hospital (tema leve deportivo) con una mujer de mediana edad (es decir, medio siglo) con aires andinos que debió faltar ayer a su servicio religioso y ha decidido regalarnos a todos, en su inmensa bondad, una homilía al uso, con su coro y todo. Como soy alérgico a este tipo de donantes, y me falta desparpajo para regalarle mis cascos (maldita vergüenza), no he podido confirmar de qué equipo es (vamos, a que Dios le reza) y no puedo agradecerle a la divinidad correspondiente el espectáculo, porque me he marchado lo más lejos posible que el edificio me ha permitido. Esta gente generosa me provoca urticaria y reconozco que de las cosas comunes que pueden fastidiarte del comportamiento ajeno, de esas que no son graves, ésta, de verdad, es la que peor llevo. ¡Qué le vamos a hacer! 

NOTA ADICIONAL: Me encantaría tener la desvergüenza necesaria para contraatacar con las mismas armas. En este caso, por ejemplo, sentarme a su lado y visitar una página pornográfica y poner a todo volumen los impostados orgasmos. Lo dicho, me sobra tanta vergüenza como ganas. 

 JOSE LUIS PIRRI ALMEIDA: 

 UNA DISTOPIA PARA RECORDAR QUE NO LO ES...