REBELIÓN
De un golpe sin piedad calló al arcángel
-gustaba meter hostias en la boca
de aquellos que locuaces y rebeldes
osaban cuestionar su tiranía.
Después pensó, colérico y maligno,
“no ha sido suficiente”, y le asestó
-no es cierto que los ángeles y arcángeles
sean seres asexuados virginales-
una brutal patada en los testículos
y le amputó las alas a mordiscos.
Y aquel pobre diablo, así, cayó,
callado y humillado, hasta estrellarse
contra un lugar a un tiempo edén e infierno,
donde tomó la forma de la sierpe.
Y en él, pasado un tiempo, dijo al hombre:
“No comas la manzana, tala el árbol
y haz con su leña un fuego, un gran incendio,
para que cuando advengan los ejércitos
de arcángeles armados de destierros
encuentren nada más tierra quemada”.
De un golpe sin piedad calló al arcángel
-gustaba meter hostias en la boca
de aquellos que locuaces y rebeldes
osaban cuestionar su tiranía.
Después pensó, colérico y maligno,
“no ha sido suficiente”, y le asestó
-no es cierto que los ángeles y arcángeles
sean seres asexuados virginales-
una brutal patada en los testículos
y le amputó las alas a mordiscos.
Y aquel pobre diablo, así, cayó,
callado y humillado, hasta estrellarse
contra un lugar a un tiempo edén e infierno,
donde tomó la forma de la sierpe.
Y en él, pasado un tiempo, dijo al hombre:
“No comas la manzana, tala el árbol
y haz con su leña un fuego, un gran incendio,
para que cuando advengan los ejércitos
de arcángeles armados de destierros
encuentren nada más tierra quemada”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario