12 de octubre de 2022

 MACHISMO...POR ENÉSIMA VEZ: 

El presidente del consejo de médicos andaluz, el muy casposo Antonio Aguado, dice que las mujeres son lesivas para la sanidad porque tienen que cuidar a la familia, y faltan más al trabajo, entre otras lindezas. 

Voy a hablar de lo que sé. Llevo trabajando desde los dieciocho años. En estos ya camino de treinta y dos, como es lógico, las he visto de todos los colores. A las mujeres, digo. Pues por cada diez que he conocido más implicadas en el cuidado de la familia, sobre todo de los hijos, he encontrado un hombre a la inversa, siendo muy generoso, y en muchos momentos de mi vida familiar me incluyo. No me meto yo en el reparto de tareas en cada casa, salvo que me pregunten. Así que parece que le estoy dando la razón al Galeno rancio. Pero no. Porque no recuerdo una sola mujer, y no es una frase a favor de galería, que perdiera el ritmo de trabajo, que no cumpliera, que no compensara, que no estuviera al quite por culpa del lastre de su hogar. Es más, las personas que he conocido, que no son pocas, afines al escaqueo, no han quedado en mi retina asociadas a un género; pero eso sí, si hiciera una retrospectiva oportunista, y poco fiable, lo se, encontraría más bigotes que uñas pintadas. Creo que la mujer sigue trabajando más en casa que nosotros. Por lo general. Pero no redunda en su rendimiento laboral sino en su nivel de estrés. En lo particular, por suerte, lo que veo es que cada pareja se reparte el trabajo como puede y/o quiere. Eso sí, ni una sola persona de mi entorno, hombre o mujer, cercana a mi edad, me ha venido con el cuento de que fulana o mengano, es decir, la parte contratante, no hace ni el "güevo" en casa. Tirando hacia atrás era casi un mantra. Así que me da por ser pelín optimista en este sentido. Algo hemos logrado cambiar. Que los gritos cavernícolas, en lo metafórico y en lo real, no nos desvíen del objetivo. 

No hay comentarios: