26 de diciembre de 2022

 25 AÑOS DESPUÉS:


David era nuestro amigo cuando el grupo lo era todo. Cuando el gregarismo corría por nuestras venas de aprendices de pandilleros, adictos a la risa y a la diversión. Cuando el precio de un cubata era la mayor preocupación y el futuro, como tal, tenía el recorrido corto de un fin de semana. David tenía trastorno bipolar, pero jamás entendimos la gravedad del asunto, hasta que hizo dolorosamente real el refrán, y a la tercera fue la vencida. Nos dejó antes de cumplir los 24 años y todos, que andábamos esquivando la madurez como podíamos, llegamos a ella a empujón limpio. De golpe. Jamás hablamos de ello, jamás nos sentamos a lamernos las heridas en grupo. Hoy, 25 años después, dos amigos de aquella figura ya mítica en nuestro universo colectivo, decidieron cerrar el círculo. Fernando y un tal Larrey, el que esto escribe, quisimos poner remedio. Han sido unos meses muy intensos, a nuestro estilo, que muchos conocéis (tú la música, yo la letra...) El resultado es el documental "Pongamos que hablo de David". Es un trabajo humilde, pero lleno de tesón y de ternura. El viernes pasado lo presentamos en sociedad, en Aluche, nuestro barrio. Canas, cañas y reencuentros, así podría haberse titulado la catártica velada. Ahora me siento un poco vacío; más que vacío, vaciado. Pero feliz. Satisfecho, con la sensación de haberle pedido, por fin, perdón a nuestro amigo. 

Aquí os dejo el link. Es, como podéis imaginar, un trabajo muy personal, pero creo que trasmite el cariño que su recuerdo mantiene en nuestra memoria...




1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy emotivo y una magnífica realizacion. Y las canciones de Sabina... enhorabuena, Larrey