No sabía mi vecina la Patro (Patrocinio) cuan de moda se iba a poner gracias al suburbano. El caso es que Metro de Madrid ha decidido ceder los derechos del nombre de una estación (Sol, ni más ni menos) a una empresa para que haga uso publicitario de él. Es la primera estación patrocianda de España. Y es una brillante idea que deberíamos extender en un momento de crisis donde la liquidez lo es todo. Policías con la espalda tuneada con alguna marca de bebidas alcohólicas. Los Dycpolis, tiene gancho. Por su puesto, a la benemérita le dejamos alguna marca de leche, por razones obvias. Podemos cambiar también el nombre a los hospitales, el Clínico de Matutano o la Fe de Viagra; aquí el juego de palabras, tan apropiado, debería subir la cuota a percibir. El Congreso ya no sería de los diputados sino el Congreso de Microlax (por aquello de sacar la mierda). TeleMadrid podría pasar a llamarse TeleMercadona y así nos ahorrábamos hasta el nuevo logo. Pero incluso se podría llegar al detalle, patrocinar los eventos, esa enfermera susurrando a la parturienta "su parto está patrocinado por enemas El esfínter reluciente, sacamos lo mejor de tí". Ese Guardia Civil calzando una multa de cuatrocientos al canto de "busque, compare, y si encuentra algo mejor..." Si, como dice Pablo Cavero es por buscar ideas innovadoras y divertidas, a los españoles no nos gana nadie, Quevedo mediante.
15 de marzo de 2012
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2 comentarios:
no me gusta. Pero creo que se le está dando más importancia de la que tiene. En todos los países se ha hecho y bueno...no es lo mejor, pero no es, tampoco lo peor. Sería peor que privaticen, aunque todo se andará, el suburbano y se eche a perder el mejor metro del mundo porque a las empresas sólo les convezca el dinero y no el servicio
Por prostituir que no quede...
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