Viernes en modo cuento...
TORMENTA:
Hoy,
mañana, en cualquier lugar:
Como cada vez que el cielo parece
romperse en mil pedazos; como cada vez que la lluvia repiquetea violenta contra
los baldosines; como cada vez que el viento zarandea las ramas de los árboles
bajo un manto de oscuras nubes, siempre que Sandra y Javier están juntos, se
abrazan, se besan, sonríen y miran al cielo con un profundo agradecimiento.
Vías
del tren, entre Madrid y Cádiz, veinte años atrás:
No llevan ni una hora de viaje. Siempre
bajo la lluvia. El tren parecía decidido a romper la lógica y terminar su
trabajo. Hasta justo ahora, rodeados de lo que se intuye hace unas horas era un
campo, tal vez de vides, o de cereal, y ahora no es más que un lago de color marrón
oscuro. Aquí el convoy ha decido rendirse. No se conocían, pero al sentarse, al
comienzo del viaje, se han sonreído, con un latido impar compartido sin ser
conscientes. Ahora, la megafonía informa de que el tren detendrá su marcha un
tiempo indeterminado por la lluvia torrencial.
- Pues vaya- dice él, cuando logra
acumular el valor de mitigar el más que probable temblor en la voz- parece que
vamos a pasar mucho tiempo en este tren…
- Ya…eso parece…me llamo Sandra…
- Hola Sandra…yo me llamo Javier.
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