DE CAJÓN DE MADERA DE PINO:
Acorde a mis limitaciones, los análisis que realizo sobre la realidad que me rodea se apellidan Simplones, todos sin excepción. Eso no quita que alguno pueda ser acertado. Por ejemplo, no sé tú, pero yo tenía muy, muy claro que Netanyahu sabía que si bombardeaba un consulado iraní en cualquier lugar del mundo, habría una respuesta armada. Es decir, en los cálculos contaban con ello. Por tanto la respuesta formaba parte de la propia estrategia. Ahora resulta que no solo dentro de su país ha recuperado crédito, donde estaba perdiendo popularidad a bombas, digo, pasos acelerados, sino que la opinión internacional le ha dado un plus de legitimidad a su agresiva y peculiar defensa del país. Es decir, bombardear intereses iraníes formaba parte de una estrategia de blanqueo de la violencia ¿cómo no se va a defender si lo han bombardeado? Eso no quita que Irán haya entrado en el juego manchándose las manos con la misma falta de respeto hacia la paz, pero lo de Israel es insoportable. Si este tipo no es echado a patadas del gobierno por sus conciudadanos, dudo que el panorama internacional sea capaz de ponerse serio. Es como ese primo díscolo, violento, que la familia trata de ocultar e incluso justificar. Lo que pasa es que este primo, igual de macarra, tiene botoncitos para bombardear países...
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