PANEL:
Cuando tenía quince años no sabía que sabía que quería ser escritor. Leía poco, esa kriptonita evitaba que fuera consciente de mi superpoder (perdonad la arrogancia). No llovía, pero ya había nubarrones, muchos, amenazantes, acumulando todas las historias que no tardarían en empezar a salir. Entonces, una profesora nos arropó a varios alumnos, sobre todo alumnas, para crear una revista en el instituto. Participé en esa creación y en los primeros números. Después decidieron que un comic, bastante malo, por cierto, no estaba a la altura para ser publicado y como era algo rebelde contra la autoridad (bastante, diría yo) preferí sentirme ofendido y pensar que era un contubernio. La revista siguió su curso, aun guardo un par de números. Yo dejé el insti, con más pena que gloria, y hasta ahí. Hoy, 37 años después, ando buscando en la red imágenes sobre centros educativos de mi formación y me ha aparecido una imagen de la revista, como mínimo, del año 2023. Y aquí me tenéis, viendo la edición de Panel de hace un par de años, extrañamente orgulloso de mi pasado, en cierta medida, congratulándome con aquel adolescente barbilampiño, rebelde en la intimidad, pero tan cobarde y timorato como sería su yo adulto. Nunca es tarde, supongo...
La portada que adjunto, del año noventa, junto a la que he encontrado, fue obra de un tal Jairo, al que muchos no conoceréis salvo que os diga que ahora se gana la vida cantando, y muy bien, todo sea dicho, como De Pedro...