Hoy toca cuento...
ANORGÁSMICAS:
Le
pasó con su primera pareja: no le gustaba recibir sexo oral. Jamás alcanzó un
orgasmo. Y lo intentaron, porque ella se dejaba hacer. Aun así, la cosa no
funcionaba. Con su segunda novia pasó algo similar, solo que no tuvo tanto
tiempo para intentar convencerla de que acabaría gustándole. Cuatro o cinco
parejas medio estables que tuvo desde entonces adolecían del mismo problema:
ninguna disfrutaba del sexo oral como receptora. Demasiada mala suerte. Cuando hace
unos meses le abandonó su última novia, con la que estuvo un par de años en los
que jamás la vio gozar con su boca entre las piernas, un viejo amigo le abrió
las puertas a un detalle con el que no contaba. Poco optimista, pese a todo, le
agradeció el consejo y una noche se decidió a teclear en busca de soluciones…
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¿El clítorix? ¿qué tendrá que ver el
clítorix con todo esto…?
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