LA PAELLA Y EL COLORANTE:
Hay una guerra civil entre los que ven que todo lo cocinado en una paellera (ay madre...) es paella y aquellos que consideran paella a la "paella" y al resto arroz con cosas. La clave, pues, está en las comillas. Un cocinero, con el que me pasa lo mismo que a Cervantes con el rincón manchego, de cuyo nombre no consigo acordarme, dio una clave que me recordó mis (forzosos) tiempos de estudiante de arqueología. El síndrome de la coca-cola. No sé si tenéis ese dato, pero la historia se estratifica como hacen los adolescentes con su ropa, la del lunes abajo, la del martes arriba, más arriba la del miércoles...solo que con miles de años. El arqueólogo va de lo más reciente a lo más antiguo, con paciencia, su brochita y su buen hacer. Estrato tras estrato. Si en el décimo, por decir algo, de golpe, aparece una lata de coca-cola, todo lo anteriormente datado pierde vigencia...Pues algo así dijo el cocinero para zanjar la discusión. ¿Qué era y qué no era una paella? Pues él dijo que desconfiaba de cualquier receta clásica que incluyera como ingrediente fundamental el colorante. Ahí tenéis la lata de coca-cola. Amén
No hay comentarios:
Publicar un comentario